Revista Cultura y Ocio
Hace unos días recibía con entusiasmo el segundo trabajo discográfico de la banda de Rock mas descarada (por juventud y rebeldía retro), potente y sin complejos, de los últimos años. Los Irlandeses The Strypes fueron una conmoción rescatando de sus polvorientas cenizas los sonidos del Rock con influencias de Rhythm and Blues que tan popular hiciesen las bandas británicas de los años 60. Además le dieron su toque personal, un poco de magia negra, mucho Beatles, algo de fuerza Ramonera y poca manipulación externa, el resultado fue realmente esperanzador. Pero ahora con “Little Victories” llega su examen de acceso. Bien, al parecer estos muchachos dejan atras los riffs contundentes que les dieron a conocer en pro de una busqueda de un sonido personal, sin dejar ecos de The Who, Chuck Berry, The Ramones, The Yardbirds o The Jam, deciden divagar con el Indie-Pop de las últimas dos décadas. No estoy preparado aún para dictaminar al respecto, pero creo que no han avanzada y este camino, al menos, los aleja de mi, decepción inicial, aunque con sus matices... No voy a seguir con esto (todavía) toda esta divagación es una excusa para recuperar la banda a quien debían haber intentado seguir los pasos, la banda de Blues/rock mas coherente y pendenciera que ha parido madre...
Si, muchos afirmaban que The Strypes sonaban como Dr. Feelgood, pero el combo formado por Lee Brilleaux (voz, armónica y guitarra), Wilko Johnson (guitarra principal), John B. “Sparko” Sparks (bajo) y John “The Big Figure” Martin (percusión) no fueron, ni mucho menos, un fenómeno efímero y puntual, los Feelgood han sido un tren de largo recorrido, incombustibles, con clase, estilo y mucha actitud rockera. Hoy, que voy casi improvisando, voy a pasar un poco de datos biográficos, para eso está la wikipedia que dice que "su repertorio se basaba en el rhythm and blues, encabezaron en Londres el género del pub rock, reacción al auge del rock progresivo y del glam rock, y que el punk reconoce como una de sus fuentes de inspiración"... si bien todo esto puede que sea cierto, no se acerca ni de coña a lo que es una banda como Dr. Feelgood. Si diré que sus coponntes provenían de diversas bandas de Pub Rock (movimiento musical británico de mediados de los setenta, concebido como respuesta ante los predominantes ritmos barrocos del progresivo, Glam y la Rock psicodélia, saturados de virtuosismo y trascendentalismo). Su momento fue sin duda la segunda mitad de los 70, se habían labrado una gran reputación como perfecta banda de directo hacia 1973 gracias a energéticas actuaciones en el circuito londinense, sus modales eran turbios y directos, su volumen y sonido potente y lascivo, pero su aspecto era el de "kinki de domingo", maleantes recién salidos de la boda de un colega.
Lo malo es que ni sus seguidores veían posible que tal energía se pudiera trasmitir en una grabación de estudio, y así fue, por que a pesar de la buena acogida de sus primeras grabaciones Down by the Jetty (1974) y Malpractice (1975), no sería hasta 1976 con la publicación de un álbum en directo, Stupidity, que los Feelgood no lograrían el éxito absoluto, numero uno en las listas británicas durante nueve semanas consecutivas, un excelente trabajo en el que dan un repaso a algunos de sus mejores temas, como “Back in the night”, “She does it right”, “Going back home”, “Roxette” o “All through the city”, y algunas versiones de gente como Solomon Burke, Bo Diddley o Chuck Berry. Luego vendría mi favorito, su cuarto Lp, “Sneakin’ Suspicion” (1977), en el que las diferencias entre Wilko y Brilleaux desembocarían en la ruptura y marcha del guitarrista y compositor... bueno, una historia que se repite una vez mas en el libro del Rock and Roll, y hasta aquí el rollo biográfico, esto no es relevante, lo importante es que su sonido era afilado y punzante, limpio y grosero... algo que muy pocos saben hacer.
La actitud de los Feelgood era desafiante, casi barriobajera (de ahí que el punk los reivindique como suyos), pero su aspecto era de ligón con estilo y pistola, un desafío constante alejado de poses violentas, aceitosos, elegantes, apestando a gasolina y pólvora, al Soho londinense (cual personajes de una peli de Guy Ritchie), demoledores, sudorosos, anfetamínicos, Blues, Rock, Soul, Whiskey, cerveza, Don Perignon, fish and Chips.. aquí hemos venido a sudar, a bailar, a beber, a disfrutar de un corrosivo e intenso Rock n Blues, a ver tocar de la hostia... y a hacer Rock del bueno... esto es lo que pienso, nada de ortodoxos análisis, es puro rock seminal, tocado con las tripas y el alma, sin tapujos ni letras trascendentes, sin momentos épicos que pasarán a la historia, Rock hecho para ligar y beber, que se descojona de moñas, moderneces y pajas metafísicas. Riffs potentes y pegadizos, no inventan nada, no son los mejores, pero le echan cojones, chicas, alcohol, contundencia y mucha clase, no hace falta mas, y no es fácil, créanme....