Hay una ciudad en la que las piedras hablan y la historia se filtra por cada bloque de mármol.
Coliseo
En esa ciudad un día se instauraron muchas de las bases culturales de occidente y fue la capital de un gran imperio. Hay algunos que le llaman la ciudad eterna o el corazón de Italia…
Pero Roma es mucho más que un museo al aire libre, es pasear por el tiempo y ver como se ha logrado una fusión de lo antiguo con lo nuevo.
Cada vez que hemos visitado Roma hemos descubierto nuevos rincones. Incluso la iglesia que aparentemente puede parecer más austera, por dentro nos podemos encontrar con impresionantes frescos, restos de la antigua ciudad o catacumbas.
Hay básicos en la ciudad que siempre se tienen que visitar cómo el Coliseo, el Panteón, el Foro Romano, Castillo San Angelo o las termas de Caracalla.
Panteón
Personalmente una de las cosas que más me gustan de Roma son las plazas. Recuerdo que hace muchos años leí el libro “Pasiones Romanas” de Maria de la Pau Janer y la protagonista estaba encantada viviendo en una pequeña plaza de la ciudad, cuando visité Roma lo entendí.
Una de las que más me gusta es la Plaza Navona en la cual hay tres grandes fuentes: Fiumi, Nettuno y Moro. La Plaza del Popolo, la del Trevi con su famosa Fontana di Trevi o la Venezia con su pastel de bodas ( Monumento a Vittorio Emanuele II ) son algunas de las más famosas.
Plaza Navona
En la ciudad del Vaticano podríamos estar un día entero visitando los museos y también es interesante visitar las catacumbas que están a las afueras de Roma.
En definitiva… ya estoy pensando cuando volver…
vista del Vaticano desde Roma