1º Pushing the limits
(Darkiss)
Género: Romántico
432 páginas
ME DICEN QUE SEA UNA BUENA CHICA, QUE SAQUE BUENAS NOTAS, QUE SEA POPULAR… NO SABEN NADA SOBRE MÍ. No recuerdo la noche que cambió mi vida. La noche en que pasé de ser popular a ser un bicho raro y marginado. Y mi familia está decidida a que siga así. Decían que la terapia me ayudaría. No se esperaban a Noah. Noah es el tipo de chico sobre el que me advertían mis padres. Pero es el único que me escucha. El único dispuesto a ayudarme a averiguar la verdad. Sé que cada beso, cada promesa y cada caricia son algo prohibido. PERO ¿Y SI ENCONTRAR TU DESTINO SIGNIFICA ROMPER TODAS LAS NORMAS? Una novela valiente y poderosa sobre la pérdida, el cambio y la madurez pero, sobre todo, acerca del amor.
Katie McGarry nos presenta una historia "romántica" de dos adolescentes que están cada uno en una situación bastante dolorosa en sus vidas. Y digo "romántica" porque es la parte que más me ha fallado de la novela, su historia de amor que no ha acabado de cuajarme del todo. A ver si me explico durante la reseña.
Echo es una chica que ha vivido un pasado muy doloroso: su madre tiene un problema maníaco depresivo con la que ha vivido un episodio bastante trágico y del que no recuerda apenas nada. Sólo que tiene una orden de alejamiento y muchas cicatrices por el cuerpo. Además tenemos que sumarle que su hermano Aires, confidente, amigo y todo lo que ella quería murió en un campo de batalla. Veremos como con terapia y junto a Noah va recordando episodios cada vez más dolorosos de su pasado y viendo todas las mentiras o medias verdades que encuentra en el proceso, algo que la hundirán poco a poco más. Sumándole que ahora vive con su padre, su nueva mujer la que acusa de destrozar su hogar y que está embarazada dándole un nuevo hermano a la protagonista.Además, Echo era una de las chicas populares, la que salía con el bombón del instituto que jugaba al baloncesto, pero de golpe ve que todo el mundo le da la espada, a excepción de Lila, su mejor amiga.
- Te mereces algo mejor -me puso el plato delante. Se había comido su mitad de la hamburguesa, pero las patatas seguían ahí.
¿Algo como un tipo que compartiese su cena conmigo y me diese todas sus patatas? ¿Un tipo que rompía las reglas para que yo pudiera oír a mi padre mientras hablaba con mi terapeuta? ¿Un tipo que me prestaba su cazadora cuando tenía frío? ¿Un tipo que me encendía con una simple caricia? Pero Noah no podía desear una chica como yo.
Después tenemos a Noah, el chico "malo" que yo tampoco he visto que sea tan rebelde. Un chico con un pasado bastante oscuro: sus padres murieron en un accidente doméstico y tan solo él y sus hermanos sobrevivieron. Ahora el estado los ha separado y luchará con uñas y dientes para poder tener una familia ellos tres. Noah es un chico que fuma sustancias ilegales, que ha estado con múltiples chicas a las que ha utilizado, pero no veo que sea un total rebelde, me ha faltado más chico malo. Durante el transcurso de la novela se ha comportado bastante bien y como cabía esperar, incluso cuando está junto Echo es un chico de lo más normal: enamorado, dulce y cariñoso.
Como os decía al principio hay muchas cosas que no han acabado de convencerme de la novela como por ejemplo su historia de amor. Me han faltado momentos juntos durante más de la mitad del libro y ese romance se me ha hecho como menos creíble. ¿Cómo dos personas que son tan diferentes pueden estar juntas? Han pasado de odiarse como daban a entender en un principio a quererse, me han faltado pasos de por medio, el proceso de enamoramiento. Es lo que más me ha fallado de la novela.
Además hay otro punto que me ha tocado mi fibra sensible y es la madre de Echo. ¿No se dan cuenta que está enferma? Vale que hizo lo que hizo y en una personal normal es incencebible perdonarla ni dirigirle la palabra, ¿pero para una persona enferma y que no tomara en su día medicamentos es para tratarla como la tratan? Es uno de los personajes que más tristeza me ha dado y no me ha gustado como ha sido tratada durante y después del libro. No me ha gustado la actuación final de Echo para con su madre y me ha entristecido.
- Mentiroso -respondió ella-. Porque la única manera de que a la gente no le importen mis cicatrices es que me quieran. Que me quieran lo suficiente para que no les importen mis defectos. Tú no quieres a la gente. Tú te acuestas con la gente. ¿Cómo podrías desear estar conmigo?
Me había descrito a la perfección. Yo no quería a la gente; solo a mis hermanos. Echo se merecía algo más. Algo mejor que yo. Una oportunidad. O la aprovechaba o me iba a casa. Besarla y arriesgarme a encariñarme con ella o dejarla y ver cómo otro tipo disfrutaba de lo que podía haber sido.
Rompiendo las normas es un libro dramático, romántico y en el que dos personas con múltiples problemas además de que parecen polos opuestos se unen, se comprenden y que llegan a despertar sus sentimientos más románticos en medio de tanto caos. Por último, decir que como historias independientes me han gustado más que como pareja romántica.