Hoy, navegando por redes sociales, me he encontrado esta viñeta compartida por Neuroautistics que me ha encantado.
Refleja a la perfección la necesidad de cambiar la forma en la que tratamos a los demás, para conseguir una personalidad sana en los demás y un mundo más humilde.
Nuestros estilos de crianza marcan tendencia en nuestra manera de funcionar, y muchas veces reproducimos los estilos educacionales que hemos recibido. Dicho de otra manera; tendemos a educar de la manera en la que nos han educado. Y es normal…
El problema viene cuando hemos sido educados mediante el autoritarismo (estilo educativo habitual de nuestr@s mayores) y seguimos reproduciendo este estilo con nuestros hij@s. Hace un tiempo hablábamos de los mitos de la educación autoritaria, desmintiendo muchas de las ideas que estaban perpetuando este tipo de educación tan obsoleta y negativa.
Debemos dar un golpe sobre la mesa y romper moldes, cambiar las maneras de funcionar, adaptarnos a los tiempos actuales y conocer otros modos mucho más positivos y respetuosos de tratar a nuestra gente. Esto supone que, en algún momento, debemos cambiar los métodos autoritarios y denigrantes y apostar por una crianza respetuosa, que resulte mucho más beneficiosa para el bienestar personal de los nuestros.
Si quieres dar el paso pero no sabes cómo hacerlo, te invito a leer. Puedes empezar por identificar las faltas de respeto más habituales a l@s niñ@s, con el fin de detectar si estás cometiendo algunas de ellas. Grábate a fuego fuerte las 20 frases que tu hijo/a NO debe escuchar y las 20 frases que mejoran la confianza de tus hij@s. A mi, en su día, conocer el método Reggio Emilia me ayudó mucho.
Dar el paso es de personas sensatas, empáticas y equilibradas. ¡Adelante!