Esta es la propuesta del equipo de diseño inglés, Arctic Associates, para la 2012 Room for London [cuarto para Londres], a las orillas del Río Támesis en Londres.
El diseño del cuarto tomó como base el poema de William Wordsworth sobre el Puente Westminster en donde describe la extraña experiencia de que la ajetreada ciudad esté dormida al amanecer y la belleza del momento. Cada huésped del cuarto registrará su experiencia en el 2012 Room for London, ya sea en forma verbal, escrita, gráfica o en un modelo de arcilla.
El techo del Queen Elizabeth Hall ofrece maravillosas vistas del Río Támesis. Se ubica entre los puentes de Hungerford y Waterloo, desde donde la ciudad parece un escenario con barcos, torres y domos. El cuarto permite la reflexión de estas vistas, en el que el amanecer y el atardecer marcan un ritmo en el que los huéspedes representan un papel en la historia continua.
En el domo, la luz del sol baila juguetonamente desde las luces hexagonales a través del espacio interior como si fuera un reloj de sol que sigue el tiempo en el día. El espacio se diseñó para la contemplación, por lo que está desprovisto de entretenimientos modernos. Se invita a los huéspedes a que se relajen, se sienten, coman, lean, se bañen, conversen y reflexionen.
Diariamente se grabará el cambio de las estaciones y se proyectará al anochecer en el muro convexo ubicado detrás de la cama doble.
En cuanto a la estructura, para reducir al mínimo la cantidad de material necesario y el peso total de la estructura, se cortaron hojas de acero perforadas para las distintas unidades, se doblaron y se soldaron a la estructura de cada unidad. Estas unidades se montarán en 11 depósitos estructurales que se transportarán al sitio. Las unidades de mosaico individuales se pueden ensamblar. Cada unidad prefabricada está equipada con un sistema inteligente de vidrio que permite a los huéspedes ajustar sus alrededores a su comodidad –la transparencia es ajustable para controlar la entrada de luz y calor-- y da aislamiento térmico y acústico. La estructura de “cáscara” permite la transferencia de cargas a las zapatas ajustables a través de la cubierta del piso.
El cuarto dirige las aguas grises de la regadera y el lavabo al inodoro. El techo será cubierto con paneles fotovoltaicos que proveerán de electricidad al Queen Elizabeth Hall.