Revista Religión
La antigua calle Serafín Sastre, ha sido rotulada recientemente con el nombre de Joaquín Turina Perez, notable compositor sevillano nacido en 1882, que fue hijo de Concepción Pérez, cantillanera y hermana de la Divina Pastora.
En honor de la Pastora de Cantillana, Turina compuso una bella composición que desde entonces engrosa el enorme y valioso patrimonio musical de la Hermandad, su madre y su tía Rosa formaban parte del coro de cantoras, por lo que la vinculación de este compositor con Cantillana y sobretodo con la hermandad Pastoreña es más que evidente y por lo tanto merecedor de una calle en nuestro pueblo, el rotulo cerámico de la calle ha sido realizado en el taller del ceramista y escultor pastoreño Luis M. López Hernández, autor de la mayoría de los rótulos del callejero de Cantillana.
Cuando la última noche de novena, el Rosario de la Pastora Divina presidido por su Simpecado blanco, discurra como desde hace siglos por la zona del Ejido y llegue a la calle Joaquín Turina, muchos pastoreños recordaran la figura de tan importante compositor y músico andaluz y la copla que en 1900 dedico a la devoción que su madre le inculcará y por la cual pasaría a formar parte de la historia de Cantillana y de la Hermandad de la Divina Pastora de las Almas.
A ti Pastora amada,
a ti dulce María,
a ti la lengua mía canta con emoción.
Atiende mi plegaria,
préstame oído atento
y escucha tú mi acento
y escucha mi canción.
Tu siervo soy María,
tu oveja soy María,
tu hijo que te adora
con sentida emoción.