El museo Tate Modern de Londres presenta una gran exposición retrospectiva dedicada a Roy Lichtenstein, pintor estadounidense conocido por sus interpretaciones ‘pop’ a gran escala del arte del cómic y personajes de dibujos animados, reproducidas con la misma técnica de puntos y colores primarios.
La muestra incluye 125 pinturas y esculturas donde se presenta la evolución de Lichtenstein desde la pincelada espontánea de su juventud, hasta la simulación de los mecanismos industriales que le convertirían en una de las figuras centrales del pop art.
Esta retrospectiva cuenta con todas las grandes obras del puntillismo gráfico por el que se conoce al artista: Look Mickey (1961), con el Pato Donald y Mickey Mouse pescando; Masterpiece, copia de copia de cómics de la época; o la obra Whaam (1963), en la que parodia el estereotipo de las historias de cómic de la Segunda Guerra Mundial.
Sin embargo, la exposición va descubriendo detalles menos conocidos del artista, como las esculturas de inspiración art-deco o sus obras sobre artistas (como la versión«lichtensteiniana» de la «Mujer de Argel» de Picasso).
Esta gran muestra retrospectiva, la primera tras su muerte en 1997, deja para el final dos de los elementos inéditos más interesantes de su obra: las series dedicadas a paisajes chinos y los desnudos femeninos, pintados en los 90. Una pintura formal a la que volvió en el final de sus días, o que nunca la abandonó, que devuelven a Lichtenstein a las aguas de la Historia del Arte.
La exposición estará abierta en la Tate Modern hasta el 27 de mayo y la entrada cuesta 14 libras.
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