Los ruidos molestos pueden tener distintos orígenes, desde los vecinos ruidosos que escuchan la música o la tele como si estuvieran solos, pasando por los ruidos de la calle producidos por coches o motos de alta cilindrada, hasta actividades de ocio malsano como suel ser el botellón o bares hasta altas horas de la madrugada, todo ello repercute de manera perniciosa sobre nuestra salud.
Generalmente supondrá una pérdida de nuestro nivel de audición, así como una perdida prematura de nuestra audición, generalmente la audición se pierde con el paso del tiempo, al estar expuesto a zonas de contaminación acústica este proceso de envejecimiento se acelera.
Además el ruido produce trastornos psicológicos asociado a que aumenta nuestro nivel de estrés, así como síntomas claros de angustia o depresión, también suelen ser responsables de problemas cardiovasculares
Es importante tomar medidas correctoras en nuestras viviendas para evitar en la medida de lo posible los ruidos perniciosos, así como legalmente hacer valer nuestros derechos.