Quiero recomendar vivamente la serie Cien años con Juan Rulfo (Amazon Prime). Dirigida por su hijo Juan Carlos Rulfo y estrenada en 2018, con ocasión del centenario del autor, pude verla y disfrutarla recientemente, acompañada de una nueva lectura de la breve pero infinita obra narrativa del creador mexicano, uno de los indiscutibles maestros contemporáneos de nuestra lengua. La serie, algo inflada —tal vez innecesariamente— en su duración, es un recorrido muy emotivo, sensible y lúcido por el mundo del autor de Pedro Páramo. Y tiene el gran aliciente de contar, además de con numerosos documentos de época (por ejemplo, fragmentos de la ‘heroica’ entrevista que pudo arrancarle Soler Serrano en su A fondo), con la voz del propio Rulfo leyendo fragmentos de su obra. Una experiencia, por cierto, que vale por todo un acercamiento esencial al verdadero fondo de su literatura: la manera en que Rulfo dice sus textos acaba siendo la lectura por antonomasia, la verdadera voz (en todos los sentidos) que los sostiene. Otro aspecto destacable es la atención que se presta a la faceta de Juan Rulfo como fotógrafo, un papel que, sin estar olvidado, a menudo ha sido poco tenido en cuenta. Y es de una importancia enorme. No se la pierdan. Para mí ha sido un verdadero viaje alucinante durante días. Aún sigo en él. «Vine a Comala..., un montón de piedras».