Briviesca ha sido tradicionalmente lugar de parada de los viajeros que venían de la Meseta hacia el Cantábrico. Su buena gastronomía y las rehabilitaciones de edificios que están llevando a cabo, le ha convertido en un emergente destino turístico.
¿Cómo llegar a Briviesca?
- En cocheDesde Madrid tomaríamos la A1 dirección Burgos. Pasado Burgos continuamos por la N-I hasta Briviesca. Si no disponemos de coche, podemos alquilar uno en cualquier capital española. En Rentalcars podemos comparar los precios entre las diferentes empresas de alquiler de coche y alquilar el más económico para el viaje.
- En transporte públicoPodemos llegar en autobús desde Burgos y Madrid, con bastante frecuencia de paso.
¿Qué ver en Briviesca?
Su origen viene de la aldea de Virovesca, habitada por los autrigones, uno de los principales pueblos ibéricos asentados en el Alto Ebro. De su dios Vurovio deriva el nombre de la comarca de la Bureba que comprende hoy 44 municipios.
Su situación, al pie de las calzadas que conectaban Astorga, Pamplona e Irún le reportó cierto esplendor en época romana. Y después como lugar de paso de El Camino de Santiago, hasta que en el siglo XI la ruta jacobea se desvió para acceder directamente a la ciudad de Burgos provocando el freno del desarrollo de la aldea.
El núcleo urbano se situó en origen en el actual cerro de San Juan. En 1305 doña Blanca de Portugal (nieta de Alfonso X el Sabio) adquiere éste señorío y decide su trasladó a su emplazamiento actual; entonces procedió a llevar a cabo un trazado urbanístico en cuadrícula insólito en las poblaciones medievales; esto le valió el sobrenombre de "La bien trazada". Los Reyes Católicos tomaron Briviesca como modelo para la urbanización de enclaves americanos como Santa Fe de Granada.
Al estar situada en la carretera que conecta Madrid y Burgos con los puertos del Cantábrico y la frontera francesa. Briviesca fue un lugar de parada y descanso de los viajeros de una de las rutas con más tráfico del reino entre los siglos XVIII y XX. La apertura de la autopista de peaje supuso la pérdida de gran parte del tráfico que antes circulaba por el pueblo.
Empezamos desde la Plaza Mayor, plaza porticada con casas de piedra en torno a un templete de música. En el lado oriental de la plaza está la torre blasonada del Palacio de los Soto de Guzmán (del siglo XVII) y que desde 1856 es sede del Ayuntamiento. A la derecha se encuentra la Iglesia de San Martín, edificio gótico reformado en el siglo XVI. Aloja varios sepulcros góticos y el retablo mayor barroco del siglo XVII, presidido por la figura de San Martín, el obispo de Tours.
Desde aquí podemos tomar la calle que conduce a las piscinas hasta el mirador de los Pinos, donde tenemos la mejor panorámica de Briviesca.
Tomando la calle de Medina se encuentra la Casona de los Martínez de España, doblemente blasonada pues incluye también el escudo de la esposa. Este edificio de 1718 está presidido por una fachada con balcón sostenido por angelotes en los ángulos y una figura mitológica de gusto rococó colocada sobre la puerta de acceso.
A la derecha se encuentra el Palacio de los Torre con su escudo del siglo XVII. El edificio se compone de una torre rectangular dividida en cuatro cuerpos y de un edificio adjunto con balconada sobre el que se asienta las armas de los Torre y de los Ortiz-Vela.
Por la Calle Mayor se llega a la Iglesia de Santa María, primera colegiata de la diócesis de Burgos. En su interior de tres naves con decoración barroca hay retablos también barrocos, capillas renacentistas como la de Santa Casilda que destaca por su retablo de las 11.000 vírgenes, realizado en madera de nogal sin policromar.
El Convento de Santa Clara es el monumento más importante de Briviesca. Fundado por doña Mencía de Velasco en 1517, es de estilo renacentista, y extiende su monasterio, iglesia, hospital y casona solariega a lo largo de la calle del duque de Frías. La iglesia conventual, del siglo XVI, obra de Pedro de Rasines y Gil de Hontañón, es lo más destacado.
Finalizamos en el Parque de la Florida cuya senda arbolada discurre paralelo al curso del río Oca. Y si te entra hambre al lado del parque hay una cafetería con bollos y pinchos muy buenos.
Más información
Web de Turismo: http://turismo.briviesca.es/
Dónde comer
Los más recomendables:
- Restaurante Fortu (Calle Marqués de Torresoto 11): muy céntrico, comida casera a buen precio. También dispone de pinchos muy buenos.
- Casa floren (calle Marqués de Torresoto 3): un buen restaurante, con comida casera, bien elaborada y buen precio.
Dónde dormir
De camino a La Rioja hicimos parada en Briviesca, un lugar tranquilo para descansar antes de comenzar nuestro recorrido descubriendo La Rioja. Si quieres pasar unos días este precioso pueblo, aquí puede hacer tu reserva.