Llegamos aquí por calles llenas de gente entre las que destacan japonesas vestidas de esta forma tradicional que eran objetivo de los turistas con sus cámaras y que nosotros tampoco pudimos dejarlas pasar sin fotografiarlas.
En la entrada del memorial nos encontramos imágenes como éstas
Para entrar hay que pagar unos 300 Yenes, en la que se incluye una barrita de incienso, algo que no nos pareció raro teniendo en cuenta que se trata de un memorial.Aquí es donde compramos la entrada
vigilados por estos guardianes con ojos amarillos… Pasado el pórtico podemos disfrutar de la enorme estatua de Kannon de 20 metros de color blanco que resalta con el fondo verde de los árboles de la colina posterior. La estatua es hueca y se puede subir por su interior por unas escaleras metálicas. En el Memorial hay un poco de tierra de todos los campos de batalla donde murieron soldados japoneses.Justo ante la estatua hay un gran estanque rodeado de algunos cerezos. Hay varios detalles en este jardín como la Bola de los Deseos ( Negai-no-tama )
Se supone que cumple tus deseos dando una vuelta por cada uno mientras la tocas con la mano derecha.Aquí se realizan 4 servicios diarios en memoria de los 2 millones de japoneses muertos en la Segunda Guerra Mundial. También podemos encontrar una imagen de Bodhisattva Ekadasamukha con 28 discípulos, así como al Dios del Viento y el del Trueno entre otras cosas.
El interior no es nada particular y no os podemos aconsejar que paguéis la entrada pero si creemos que por lo menos hay que asomarse a la puerta y ver esta formidable estatua de Kannon sentada sobre el techo del edificio.
.