Saber bailar es saludable

Estudios realizados por una universidad norteamericana, descubrieron resultados sorprendentes sobre el atractivo físico de las personas que bailan. Comprobaron que estos tienen más cualidades atractivas frente al sexo opuesto.

Por primera vez se pudo analizar biométricamente los datos arrojados en diversos estudios y se pudo comprobar que las mujeres prestan más atención al torso, cuello y cabeza, y no tanto a los movimientos rápidos. Descubrieron que los hombres que bailaban bien, potenciaban más el atractivo físico frente a las mujeres, también que la capacidad reproductora es mayor que hombres que no bailan, y que además los hombres que bailan tienen mejor salud.

Al parecer y en buena hora, la moda de cuidarse y estar en forma está floreciendo y ayudando a las personas a llevar una vida más sana y equilibrada. Así mismo las clases de baile han tomado fuerza y desde el funky al latino, pasando por las danzas orientales, las academias y los gimnasios están llenos de gente que quiere aprender a bailar.

Es en este terreno, donde podemos abordar el baile como un deporte propiamente dicho, se considera una actividad aeróbica de bajo impacto, por lo que no suele provocar lesiones y se consigue una descarga moderada de energía. En una clase de baile (por ejemplo en una clase de bailes latinos) se pueden quemar unas 450 calorías. Por lo que no sólo nos ayudamos a mantener un peso adecuado, sino que nos ayuda a moldear y tonificar todo el cuerpo, especialmente en la zona de brazos, piernas y abdomen.

También ayuda en gran medida al sistema esquelético, siendo una herramienta eficaz a la hora de prevenir problemas óseos y artríticos; fortalece huesos y músculos, aumentando la elasticidad (músculos y tendones), la movilidad muscular y articular, así como la capacidad de movimientos.

En contra de lo que muchos han sugerido, el baile es excelente para mejorar la postura. Nos ayuda a mantenernos más derechos y a aliviar tensiones de cuello, hombros y espalda. El cuerpo se va haciendo más flexible, de forma natural, a diferencia de otros deportes. Mejora el equilibrio, lo que a su vez puede evitar caídas. Ayuda a prevenir enfermedades como la diabetes, hipertensión arterial y depresión. Además existen varias teorías que aseguran que el baile ayuda a aliviar los dolores menstruales: Bailar durante el periodo ayuda a sentirse mejor psicológicamente y a disminuir la sensación de hinchazón.

Toda aquella persona que haya salido una noche a bailar, si se detiene a pensar un momento, recordará que sólo por haber estado bailando, se sintió menos estresado y al menos durante el tiempo que bailaba, dejó de lado sus problemas.

El baile constituye una gran ayuda a la hora de mejorar las relaciones personales, ya que ayuda a superar la soledad y la timidez y a hacer nuevos amigos. Fortalece la autoestima, pues levanta el ánimo y fomenta la confianza en uno mismo.

Como lo he dicho en otros artículos sobre la actividad física y acá incluyo el baile, se liberan una serie de sustancias como la serotonina que ayuda a este fin y también a aumentar la autoestima. Esta sustancia química posee efectos calmantes que disminuye el hambre, se elevan los niveles de adrenalina y serotonina en el cuerpo, aumentando el optimismo. Así se previene la depresión ya que libera endorfinas y otras hormonas relacionadas con la felicidad. Aumenta la vitalidad, ya que favorece el sueño y potencia la energía vital.

Al bailar, el cerebro se mantiene en forma pues se estimula la concentración. Existe destreza y habilidad de coordinación que se adquiere y desarrolla durante el baile. Esto ofrece además esperanzas en la batalla contra la enfermedad de Alzheimer, ya que ayuda a aumentar la actividad prefrontal y temporal y a mejorar las habilidades de comunicación, la memoria y la atención.

En el terreno más carnal, bailar ayuda a desinhibirnos, a encontrarnos con nuestro propio cuerpo y a despertar la sensualidad. Hace a las mujeres sentirse más femeninas y deseadas; a los varones, mas masculinos y seguros.

Y ustedes pueden seguir indagando, pues esto es sólo una porción de los beneficios que el baile puede reportar a nivel físico y mental.

Hasta existe el baile como terapia. Acá lo describen los danza-terapeutas:

La Danzaterapia: Técnica que nos da la posibilidad de transgredir conceptos establecidos por la sociedad; es la posibilidad de sentir alegría, confianza y seguridad. Nos permite transformar lo dado, crear una respuesta a situaciones nuevas, y una nueva respuesta a situaciones viejas. La técnica promueve la actitud activa de los pacientes, transformándolos en protagonistas de su propia curación brindando herramientas para continuar y planificar sus vidas. No tiene límite de edad, sexo, condición social, grado de disponibilidad del movimiento o nivel de desarrollo intelectual para llevar a cabo esta técnica. El Danza-terapeuta motiva en el individuo el movimiento natural y espontáneo como forma de expresarse y a través de este, puede conocer nuestro estado interior y facilitarnos un enriquecimiento personal.

Algunas aplicaciones de la Danzaterapia son:

• Trabajo de la psicomotricidad de los niños.
• Autismo (la experiencia con el cuerpo mediante el ritmo les permite movilizar la vía de comunicación en su interior).
• Sordera e hipoacusia (no significa no poder pensar o sentir, descubre el lenguaje encerrado en el cuerpo para que pueda danzar con las palabras, formas, colores y ritmo).
• Ceguera.
• Discapacidad mental (entra en juego el deseo y el placer de la persona por el movimiento ya que en muchas de estas circunstancias resulta difícil o imposible comunicarse a través de las palabras).
• Discapacidad física (todos los cuerpos tienen un lenguaje, y esto no tiene nada que ver con cómo sea ese cuerpo).
• Trastornos de la alimentación.
• Enfermedad de Alzheimer…

¿Qué sigue?

Luego de conocer todas las ventajas y beneficios del baile ya no tienes más excusas. Si te aburre ir al gimnasio, existen múltiples opciones para ejercitar tu cuerpo y tu mente, así como diversas posibilidades de comunicación no verbal con los demás.

Si no sabes bailar aún, es hora de que comiences a practicar, y si vas a una disco, a moverte y disfrutar de todos los beneficios.

“Bailar alegra la vida, es prácticamente imposible bailar sin sonreír”

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