
Felipe I de Castilla, el Hermoso (1506), murió por beber demasiada agua fría nada más terminar un partido de tenis?
Felipe II de España, el Prudente (1598), falleció por una infestación masiva de piojos (ptiriasis)?
Fernando VI de España, el Prudente (1759), murió por un cólico sentado en la taza del retrete?
Ésta entrada la he sacado del blog “La curiosidad mató al hombre”. Su artículo es muchísimo más extenso e interesante. Yo solo he rescatado los protagonistas españoles de su lista de “muertes absurdas”.