¿Sabías que el 85% de las startups no tienen mujeres como fundadoras?

Triste, pero cierto. La poca representación femenina entre los fundadores mundiales es consecuencia de un panorama que complica la participación de las mujeres en estos proyectos empresariales.
La realidad es que en pleno siglo XXI sorprende la desigualdad de género en un sector tan innovador. De acuerdo a un análisis de la OCDE, la posibilidad de que una startup reciba financiamiento es un 10% superior en aquella fundada por hombres, que las que incluyen al menos a una mujer.
Pero eso no es todo. Cuando por fin llega el dinero, la presencia femenina también parece entorpecer en la generosidad de los potenciales inversionistas. Las cifras son las siguientes: la financiación recibida por las startups cuyos equipos fundadores incluyen mujeres es un tercio inferior que la que alcanzan aquellas lideradas solo por hombres.
En cualquier caso, es cierto que este mundo es dominado por hombres y no es ningún secreto. Sin embargo, hay estudios que ponen de manifiesto que existe un talento que no se está aprovechando. Las startups lideradas por mujeres tienen un menor índice de fracaso y suelen estar destinadas al ámbito educativo. Mientras que las compañías encabezadas por un hombre fracasan en un 52% de las ocasiones, los proyectos que son impulsados por ellas solo lo hacen en el 22% de los casos. Esto es porque las mujeres son más cautelosas a la hora de tomar riesgos.
Al final y con estos estudios, lo que tenemos que darnos cuenta es que las diferencias entre género a la hora de liderar no quiere decir que sea más recomendable tener a una mujer o a un hombre en un puesto directivo, lo importante aquí es que los dos deben trabajar juntos para ver perspectivas mas diversas y complementarse en el momento de tomar decisiones.