Revista Cine

"Sabor a vida", un derecho fundamental traducido en proyecto solidario

Por Ruthbermo
"Buenos momentos, un sitio, una ilusión, puestas de soles y amaneceres, un sentimiento colectivo, una amistad, una esperanza, sueños en color y pesadillas en blanco y negro, fuerza, superación, compañerismo..."Sabor a vida" es muchas más cosas. Más que una filosofía de vida, es poder ver vestigios de belleza en los que se prejuzgan como desestimables pequeños detalles. Eso y mucho más es lo que trasmite el proyecto de Francisco Piñeiro (cocinero, persona y Premio Nacional de Gastronomía 2011/2012, no necesariamente por este orden).

Tras el texto (más bien, pretexto) de "Sabor a vida" doce cocineros o, hablando con propiedad, doce amigos que comparten pasión por los fogones, se han reunido para acercarnos un poquito de su sabor a vida particular, abriéndonos las puertas de su cocina, de su mundo, por una buena causa. Gestado con ilusión y vivido con alegría, "Sabor a vida" es mucho más que un libro de cocina; buscando siempre la cara amable de la vida, estos jóvenes se definen en su perfil de Twitter como "un proyecto de libro solidario de doce cocineros, dos sumilleres y un fotógrafo a favor de la lucha contra el cáncer".
Aquellos que los venimos siguiendo de una u otra manera, casi podemos sentir este sabor a vida que van desgranando a cucharadas. Intangible, difícilmente identificable y endiabladamente inexplicable. A falta de palabras más justas, nosotros lo vemos como una hermosa sensación, la sensación de saber que aún existe gente que se preocupa por ayudar a los demás, en este caso, haciendo lo que mejor saben hacer, que es cocinar.

Este "Sabor a vida" ya físico, en formato visible y palpable se presentó el 23 de abril (Día del Libro) en el Hostal de los Reyes Católicos en Santiago de Compostela. Todo el dinero recaudado con las ventas de esta publicación ira a parar a manos de la Asociación Española de Lucha Contra el Cáncer. Y es que sobran los motivos. Porque todas las personas, absolutamente todas, tienen derecho a conocer y disfrutar del sabor a vida. ésta y solo ésta, juzgamos que es la fuerza motriz y leit motiv de éste encomiable y caprichosamente adictivo proyecto.
Quizás muchos lo llamen "libro de recetas"; yo lo llamo "lección de humanidad". Sea como fuere, la creatividad de los cocineros Francisco Piñeiro, Manel Oliveira, Alberto González, Marcos Cerqueiro, Chechu Rey, Benjamín Vega, Mark Wernik, Javier Gómez, Juan José Mariño, Eloy Cancela y Nacho Rodríguez, y de los sumilleres Óscar Quintana y Manuel Regueira, cuyos platos ha inmortalizado el fotógrafo Ramón Escuredo, se comercializará con el fin de ofrecer a todos la posibilidad de colaborar con una noble causa.
Como muchos otros, nosotros también hemos podido tocar, olfatear, ver, hojear y manipular un ejemplar del auténtico "Sabor a vida". Porque, ¿acaso existe una sola biblioteca en el mundo en que no tenga cabida tal título?
Publiqué este artículo por primera vez el 4 de abril de 2012 en el blog de la Escuela de Alto Rendimiento UEM


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