El British Museum no se queda atrás respecto a los otros museos de Londres en cuanto a interés matemático. La parte instrumental puede parecer poca cosa si la comparamos con la riqueza arqueológica griega o mesopotámica pero no es nada despreciable: armarios y armarios con estanterías repletas de instrumentos de dibujo, astronómicos, gnomónicos, ábacos, o de laboratorio.
Entre los ábacos de bolsillo destacamos uno romano de bronce pues han sobrevivido muy pocos.
Una estantería astronómica con planetario, astrolabio plano y anteojo da idea del tipo de exposición de la sala 1 (Enlightenment) anexa al gran patio.
La supervivencia de los imperios va unida a sus innovaciones científico-técnicas: el británico no fue una excepción. La lengua es compañera del imperio pero no solo ella.