En pequeñas pinceladas es dónde se nota… esto está cambiando! muy poco a poco (pensarán los más escépticos y pesimistas), de acuerdo! pero ya no hay vuelta atrás. Una vez que empezamos a cambiar y a introducir nuevos hábitos conscientes y responsables en nuestras vidas todo fluye y queremos cambios en todos los ámbitos de nuestra vida. Bueno, no quiero divagar con demasiadas ideas, me voy a centrar el tema que me ha hecho escribir hoy.
Hasta ahora el tema de la maternidad y crianza era “tarea” casi exclusiva de las madres, el padre el que más o el que menos implicado, parecía estar siempre relegado a un segundo plano. Las reuniones de mamis, los foros… estaban copados por la figura femenina de la pareja compartiendo experiencias e intentando resolver problemas, pero hoy en día esto empieza a cambiar. Ya nos podemos encontrar en los foros con mensajes de algún papi, incluso algún osado manifiesta su “salida del armario” como padres que luchan y se esfuerzan por implicarse en una crianza respetada.
Son pocos, si, pero alguno hay como el blog de un papá que quiero compartir hoy con vosotr@s, se llama That fuchking attachment parenting. En el nos encontramos el día a día de un padre que aprende a organizar y compartir su vida porque no quiere dejar de ser él mismo con sus gustos y aspiraciones, demostrando que se puede amar y respetar sin imponer ni criar niñ@s en serie. Al mismo tiempo ilustra cada entrada con un vídeo musical.
Os transcribo algunas de las palabras con las que se presenta en su blog:
“… Porque un niño no es algo que te toque en una tómbola, no es un disco duro formateado en el que verter tus mierdas y neuras. Es una persona que te ha sido dada con una misión: que crezca feliz y sano. Si no eres capaz de verlo así, te mereces que se sequen tus entrañas.
Y porque un niño no es sólo cosa de mujeres. Los padres tenemos mucho que decir. No tenemos tetas, no tenemos leche, pero tenemos todo lo demás. Hay que reivindicar la paternidad respetando a la criatura a la que has insuflado vida.
Estoy saliendo del armario.”
Me quedo con una frase leída en Ojitos que brillan “detrás de una gran mujer con bebé hay siempre un gran hombre“, pero además hay que animarlos a que salgan de la sombra y compartan y disfruten de la crianza de los hijos.