Salina romana do Areal (Vigo)

Salinas do Areal

En el centro de la ciudad de Vigo se encuentra musealizada una salina romana, que estuvo en funcionamiento durante los siglos I-III d.C.
Dadas sus dimensiones, más de 10.000 m² (aunque solo 300 están musealizados), podemos intuir la importancia de Vigo en época romana. Además de la salina, la ciudad olívica cuenta con otros yacimientos romanos como villae, necrópolis, etc.

La salina tenía como fin producir sal, un bien muy importante tanto para la alimentación, pues es imprescindible para el ser humano, como para la conservación de productos como la carne o el pescado. A mayores tenía otros usos secundarios como el tratamiento de pieles o la elaboración de salsas  como el garum.

Normalmente las salinas contaban con un sistema de cubetas que iban descendiendo de modo que el agua del mar caía por la fuerza de la gravedad hasta el lugar donde cristalizaba mediante la evaporación. En el caso de la salina de O Areal sucede lo contrario. Las cubetas van ganando altura y se cree que para que el agua llegase a la zona de cristalización sería necesario el trabajo manual.
El trabajo se realizaba durante los meses del verano, de junio a septiembre, cuando había menos lluvias y mayor insolación, ya que para originar sal era necesario evaporar el agua. Pero antes, en la primavera, los trabajadores ya comenzaban a realizar tareas de acondicionamiento de la salina. Después, la cosecha se almacenaba en otras estructuras y los salinatores recogían la sal que amontonaban para secarla. Dos eran los tipos básicos de este mineral: sal fina para el uso culinario y  sal gruesa para el 'industrial'.

cestas y barril para transporte

ánfora 

La sal se transportaba en distintos recipientes, desde las conocidas ánforas hasta cestas pasando por barriles o pequeños botes cerámicos. A su vez, estos se llevaban en carros o parihuelas a lugares de salazón próximos. Los recipientes cerámicos como las ánforas son las más fáciles de encontrar mientras que las cestas o barriles, por su naturaleza, no lo son tanto. En el caso de Vigo, a pesar de que las condiciones climáticas y edáficas no son propicias para la conservación de materiales orgánicos, se han encontrado algunos recipientes e incluso restos de alimentos no asociados a la salina.

El pasado romano de Vigo es muy interesante pues nos muestra una serie de actividades económicas ligadas a la explotación de los recursos marinos ya que, además de la salina, en las proximidades también se encuentra una factoría de salazón. 
La visita al Centro Arqueolóxico do Areal es totalmente recomendable ya que la salina está en muy buen estado. Esperemos que Vigo siga potenciando sus yacimientos romanos.
Fuentes:
Centro Arqueolóxico do Areal
Imágenes y vídeo: Propios.
Más información:
http://www-museodomar.xunta.es/salinae/
https://www.facebook.com/pages/Centro-Arqueol%C3%B3xico-do-Areal-Salinae/744084125605645?fref=ts