San Andrés, de Brad Peyton «Cuidadito con las Fallas, que son más chulas que un ocho»

Con atraso, es así como viene esta crítica. Tendréis que disculparme porque quería traeros mi opinión de esta película casi que el día de su estreno y mirad a qué fechas estamos. ¡No tengo perdón de Dios! Es más, ya he visto otras películas y también se me están acumulando en el tintero. Pero bueno, vamos al lío que nos perdemos:

Título Original: San Andreas
Año: 2015
Duración: 114 min.
País: Estados Unidos
Director: Brad Peyton
Guión: Dwayne "The Rock" Johnson, Alexandra Daddario, Carla Gugino, Paul Giamatti
Sinopsis: La falla de San Andrés acaba cediendo ante las temibles fuerzas telúricas y desencadena un terremoto de magnitud 9 en California. Ante tal catástrofe, el piloto de helicóptero de búsqueda y rescate Ray y su ex esposa Emma viajan juntos desde Los Ángeles hasta San Francisco para salvar a su única hija, Blake.

Otra película palomitera de catástrofes. Eso pensarán muchos de "San Andrés", la nueva película del conocido actor denominado "La Roca". Y sí, puede que tengan razón. Es más, la tienen. San Andrés es otra película palomitera-blockbuster de catástrofes que, misteriosamente, se encuentran centralizadas en Estados Unidos. Pero tiene su encanto, oiga. ¡Cómo no me va a gustar tanta destrucción junta! Soy un gran amante de las películas de terribles terremotos que devastan las sociedades, o los huracanes que levantan casas... ¡Una de mis películas favoritas es " El día después de mañana"! Fui al cine a ver San Andrés con unas altas expectativas pero consciente de lo que iría a ver sería un espectáculo hollywoodiense. Hecho sólo para entretener.

Y me entretuvo, muchísimo. Me levanté de la silla temblando porque la película es realmente intensa. Empieza de forma interesante, presentando a los conocidos personajes arquetípicos de esta película (el matrimonio con problemas, el súperhombre que salvará a su prole, la mujer decidida a dar la vida por sus hijos, el hijo que es un máquina mental que no sabemos cómo no asiste a congresos de la NASA...), y estos van pasando sin pena ni gloria porque no son realmente importantes. Lo importante es la Falla. Oh, sí, esa falla follonera, que sólo quiere marcha para su body. Y para el nuestro, de paso. Ahí es cuando empieza la película, cuando la tensión se siente levantando la sala.

A la primera sacudida, todo el mundo se viene abajo. Y los efectos especiales son espectaculares. Un sobresaliente en planos y escenas de heroísmo emocionante. El protagonista tiene razones para ser tan máquina, eso sí me gustó. Buscaron la manera de que en un solo hombre pudiera entrar toda la Marvel de forma más o menos creíble. Es un bombero especialista en rescate con helicóptero. Esa gente existe de verdad y tiene dos cojones bien puestos (sean hombres o mujeres, ya entendéis qué quiero decir) y en la cinta se nutren del protagonista, que va a salvar a toda la familia, desperdigada por el continente Americano en plena destrucción masiva. Los otros personajes no están mal, parecían sacados de una película de telefilm pero mientras fue avanzando, más me fueron convenciendo. La hija del matrimonio roto, y su repentino pretendiente se llevan la palma porque son simpáticos y valientes, sin caer en feas conversaciones pijas en mitad de una catástrofe (cómo sí ocurre en The Jurassic World). O sea, que aunque no son unos personajes inolvidables, sí que terminan haciendo algo interesante en la película y empatizas con ellos.

Es sorprendente la cantidad de vehículos diferentes que sabe manejar Dwayne Johnson en esta película, aportando acción y más acción sin parar y también es increíble lo devastador que puede ser un terremoto. Esas dos cosas dejan impactados al espectador. Ver como grandes edificios se consumen por dentro, o como unos cientos de barcos se enfrentan a un tsunami (sin duda, una de las mejores escenas de la película, ¡qué tensión, madre mía!) es algo que os permite San Andrés, por lo que si queréis ver destrucción de la buena, San Andrés es una digna opción en el cine. Está bastante bien y cumple con su cometido: entretener.

Si tuviera algo que criticarle, y lo critico duramente además, es ese final ridículo y donde nace de nuevo ese patriotismo tan cutre del Tío Sam. ¡Es que es insoportable! El final es una cutrada del porte de un mastodonte, con bandera ondeando incluida. En general, la cinta se libra de los insoportables discursos pro América y pro EEUU. Pero cuando llega ese final... te pones rojo de vergüenza ajena. Una bonita manera de cagar un producto medianamente decente y hacer que salgas del cine con cara de "puf, qué americanada", cuando en verdad la película no es tan "americanada", son solo cinco minutos de toda la película.

Lo dicho, puro cine de acción y catástrofes. Solo apto para amantes del cine de destrucción y de la acción. No encontraréis nada profundo en esta película, así que abstenerse cinéfilos de pura cepa intelectualoide.

PD: ¿Soy el único que ve un indicio gay entre la relación del personaje de Paul Giamatti y su compañero/novio?

→Lo mejor: Los efectos especiales y la historia de destrucción. Las bellas imágenes de EEUU desde el aire. La escena del tsunami y del rescate de la niña bajo las aguas.
→Lo peor: La escena final donde ondea una bandera estadounidense. Qué cutrez.
→Puntuación: 8/10