Esta cerveza es todo un homenaje a la ciudad que vio nacer a la marca San Miguel, Manila, y una vuelta a los orígenes de esta cerveza.
San Miguel Manila se presenta en tercios y es una cerveza con un color dorado intenso, altamente lupulada que tiene un sabor suave, casi dulce, a la entrada a la que sigue un intenso sabor amargo que perdura en el paladar.
Es perfecta para maridar tanto con comida oriental como con comida mediterránea.
Se aconseja servir a unos ocho grados y mejor en copa de cristal, dejando unos dos centímetros de espuma.
En mi casa, somos muy dados a probar diversas cervezas, desde las más comerciales hasta las puramente artesanas y San Miguel Manila nos ha sorprendido gratamente, su sabor podríamos calificarlo como a medio camino entre una comercial y una artesana.
Aunque por su sabor es perfecta para tomar durante un almuerzo o cena, también es muy apetecible para tomar con un aperitivo como queso o frutos secos.
A partir de ahora, San Miguel Manila será una de las cervezas que compraremos porque, si tienes un evento en casa, es un acierto seguro si tus invitados son muy "cerveceros"
Vosotros, ¿habéis probado esta variedad de San Miguel?
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