Tenéis que hidratar la gelatina en 1/2 taza de agua caliente.
Mientras se hidrata la gelatina, licuáis la sandía, la pasáis por un colador y reserváis.
Ahora mezcláis la gelatina hidratada con el zumo de sandía, el azúcar y el resto del agua caliente.Sobre bandejas cubiertas con papel absorbente, colocáis las dos mitades de la sandía y las rellenáis con la gelatina. Dejamos enfriar en la nevera cubiertas con film transparente.
Cuando haya cuajado la cortáis en gajos y ya tenéis listo este postre tan refrescante.
* Otra opción que tenéis es cambiar la gelatina de sandía por una de fresa o cereza, para ello necesitareis preparar dos sobres de uno de estos sabores.Imágenes vía www.buzzfeed.com