Miss Caffeina (Foto: @SanSonido)
Si, diez días he tardado en contaros como hemos vivido el SanSan Festival de este año, es el tiempo que he considerado oportuno para que la organización emitiera ese comunicado, en el que iban a explicarnos todas las trabas y problemas que han tenido para organizar la edición de este año, y gracias al cual nosotros entenderíamos muchos de lo errores y desatinos que hemos vivido durante esta Semana Santa en Gandía. Pero como era de esperar, el comunicado no ha llegado.
Vaya por delante que era la tercera vez que asistía al festival, y siempre lo he hecho por decisión propia. Y lo hacia porque realmente me merecía la pena y me gustaba la idea de ir disfrutando del crecimiento del festival desde dentro. Hasta que llegó la tercera edición.
Es verdad que desde el principio la cosa pintaba mal.. que si la ubicación, plazos que nunca se cumplian y eso que simplemente era para dar información,.....etc. La fecha de celebración se iba acercando y la información era mínima y sesgada, y como fin de fiesta llego el cambio de recinto, que a pesar de que nos lo quisieron vender como lugar perfecto, estaba condenado al desastre. Y aún quedaba por llegar lo mejor, la cancelación de un tercer escenario.
Porque la tarde anterior a su comienzo, los grupos que no tenían asignados un horario en el festival, cancelaban sus actuaciones. Pero no penséis que nos enteramos por la gente del SanSan, no, fueron los propios grupos los que comenzaron a comentar en sus redes que finalmente no podrían actuar en Gandía. Ole, ole y ole.... De verdad que ese tercer escenario fue desaprobado la ultima tarde, o simplemente si hizo la gestión de aquella manera y a la hora de la verdad el técnico del ayuntamiento os dio calabazas? Y después de que grupos como Viva Suecia, Kuve, Mayor Tom, Odio Paris o The Parrots se vieran obligados a quedarse en casa, recibieron el cariñosos comentarios por parte de los organizadores dudando de su apoyo al festival. Bochornoso.
Otros grupos como Veintiuno, Nunatak o Shetler, adaptaron sus espectáculos a un formato especial y misteriosamente formaban parte de unos "Secret Shows" que se celebraban en el interior de la discoteca....jajajajajajaj. El descojone mayúsculo. No, no asistí a ninguno de ellos, y tenia dos razones de peso. Primero mi amor propio, no me gusta que se rían de mi. Y segundo, que algún grupo que despertaba en mi más interés estaba sobre alguno de los otros dos escenarios.
L.A (Foto: @SanSonido)
La primera noche el caos se preveía nada más entrar. Baños femeninos con colas kilométricas de más de media hora, una zona VIP a la que la gente accedía con total libertad con tan solo apartar la valla (nosotros no estábamos en su interior, pero asistimos tan incrédulos como los propios VIP al incesante trasiego), la obligación a comprar un mínimo de token (los cuales no era retornables), una zona de restauración irrisoria y muy, muy debilitada en cuanto a ediciones anteriores, marcas blancas en algunas bebidas que los propios camareros presentaban como "de palo", una cercanía entre los escenarios principales que provocaba que las pruebas de sonido pisaran en ocasiones los conciertos en directo......etc.
Con este explosivo coctel de despropósitos era complicado disfrutar de la música en plenitud, el motivo principal por el que estábamos allí. Y aunque no quiero pienso hablar de los conciertos, como medida de protesta personal hacia el esperpento, si quiero resaltar los directos de L.A, La Habitación Roja y Polock, que ofrecieron unos conciertos excelentes a pesar de todo.
También me llamo negativamente la atención el posicionamiento de los líderes de grupos de primera linea, que aprovechando su posición sobre el escenario, se posicionaron egoístamente a favor de la organización, olvidándose de los compañeros que finalmente no pudieron actuar y de su publico, que estaba aguantado allí estoicamente. Parece que algunos siempre estuvieron en la parte alta del cartel.
Dorian (Foto: @SanSonido)
Un festival para olvidar, al que con seguridad que no volveré a asistir, si es que se celebra alguna edición más, donde lo único que priorizaba era el negocio olvidándose el espíritu real de los festivales. Un experiencia conjunta con la música como hilo conductor.
@IbandSonido