Santa Claus, personaje ficticio inventado para comerciar con la Navidad y descristianizar el mundo, ha sido arrestado por hacerse pasar por San Nicolas de Bari, el obispo santo del siglo X que distribuía regalos a los niños pobres de su diócesis.
Como invento pagano, Santa Claus nada tiene que ver con el cristianismo o la Navidad, sino que es un arma de intereses anti-cristianos para ocultar a Jesucristo y desviar la atención de los personajes cristianos de la historia.
Lo triste es que muchos padres cristianos permiten a este impostor pagano entrar en sus hogares y engañar a sus niños.
La detención del impostor, ocurrida en Nueva York cuando Santa se retiraba a sus tierras del norte para celebrar su triunfo, es una gran noticia para los que cuidamos las tradiciones y apreciamos las raíces e influencias cristianas en la cultura occidental.
Como obispo, San Nicolás predicaba la Palabra de Dios y el mensaje del Evangelio. Al ser reemplazado por el impostor Santa Claus, desapareció mitra episcopal de San Nicolás, que fue reemplazada por una gorra roja. Su cruz pectoral también desapareció por completo y cambiaron su residencia de Turquía al Polo Norte, desde donde cada Navidad llega volando, en un trineo arrastrado por venados.
Los que conspiran para descristianizar la Navidad usan astutamente a "Santa Claus" para vender toda clase de mercancías, mientras le ocultan al publico sus intenciones de arrasar con el cristianismo y sus símbolos y tradiciones.