Si hay un tema que la iconografía teresiana ha reflejado exhaustivamente a lo largo de la historia es el de la Santa como escritora. Ya los grabados de las primeras ediciones de su obra literaria incorporaron a la figura de Teresa de Jesús el tintero, la pluma, el libro y la mesa. Fue también el tema elegido para su representación en el tapiz de la Canonización que se desplegó en la basílica de San Pedro de Roma.
Frente a la postura arrodillada, que suele ser la más común en otros momentos, como en la Transverberación, Teresa escritora aparece sentada o de pie.
Además, se suele añadir, también desde el inicio, la imagen de la paloma, símbolo del Espíritu Santo, que nos indica que estamos ante una escritura de inspiración divina.
Este tipo iconográfico puede observarse ampliamente en la colección de estampas de Manuel Navarro. Así, la vemos en los Gozos o en las imágenes de Épinal, que fueron estampas de temática popular y vivos colores que se produjeron inicialmente en Francia durante el siglo XIX.
También se aprecia esa temática en un tipo de grabados del siglo XVII, provenientes de Amberes, que se conocen como Ghebett (súplica), en las estampas mortuorias (detrás llevaban una inscripción acerca del difunto), o en las de tipo catedral, que representan una ornamentación arquitectónica alrededor de la figura.
La última estampa del video es una cromolitografía de la segunda mitad del XIX. Se trata de es un método de litografía a través del cual los dibujos son impresos en colores.