Santander y la península de la Magdalena

“Hay un palacio en tu cabeza. Aprende a vivir siempre en él.” (Grant Morrison)

Con esta nueva entrada de Santander cerramos la ruta de Cantabria. En verdad no tuvimos mucho tiempo para disfrutar de la ciudad, y si este es tu caso… te recomendamos que visites lo que creemos que es más bonito de Santander, la península de la Magdalena.

¿Habéis visto alguna vez la serie de Gran Hotel? Pues los exteriores se grababan aquí, en el Palacio de la Magdalena. Pero esto no es todo lo que nos puede ofrecer, tenemos un mini-zoo e incluso un pequeño museo naval al aire libre.

Como ya contamos en las anteriores entradas nos alojábamos en el Hotel Silken Río Santander, la ubicación es bastante buena si se quiere ir a la península de la Magdalena dando un agradable paseo recorriendo las playas del Sardinero, la Concha y el Camello (10 minutos). La playa del Camello recibe este nombre de una formación rocosa que tiene bastante similitud a este animal, es bastante curioso asique no os olvidéis pasar por aquí.

Si os encontráis a más distancia, en la playa del Camello hay un parking gratuito, pero eso sí, tenéis que ir a primera hora de la mañana puesto que el aforo se completa extremadamente rápido.

La península es un parque público que abre sólo durante el día (8h-22h), pero no siempre fue así… y es que antes era la residencia de verano de Alfonso XIII (regalo del ayuntamiento de Santander), actualmente, el Palacio de la Magdalena es la sede de la Universidad Menéndez Pelayo.

Una vez en la península tenéis dos opciones, subir en el tren turístico (conocido como “El Magdaleno”) que la recorre de arriba a abajo explicándolo todo con detalle durante 30 minutos, o ir andando hasta el Palacio de la Magdalena. Nuestra recomendación es esta última, así podremos ver el pequeño zoo (con focas, leones marinos y simpáticos pingüinos), la estatua de Félix Rodríguez de la Fuente, las caballerizas reales y el museo naval.

Desde el lugar dónde se encuentra el mini-zoo, hay unas vistas impresionantes de la costa de Santander. Podéis tomar unas fotografías preciosas del mar rompiendo contra las rocas.

El museo naval del  hombre y del mar es un museo al aire libre, por tanto la “entrada” es gratuita. En el podemos ver las tres carabelas que utilizó el cántabro Vital Alsar en su viaje a América, una balsa que servía para recorrer ríos, y una burbuja de salvamento en forma de “ovni”.

La visita al Palacio por dentro es recomendable, por tan solo 3€ una guía te va explicando todo a la perfección con anécdotas incluidas. ¡Cuidado con los horarios! Las visitas son cada hora en punto y según el día de la semana acaban antes o después, podéis visitar su página para tener más información.

Después de nuestro paseo podemos volver hacia la zona de nuestro hotel (avenida reina victoria) y disfrutar de un pequeño parón gastronómico en el Restaurante Balneario de la Concha. Un restaurante con diseño minimalista situado dentro de la misma playa de la Concha, con amplios ventanales de cristal posee una de las mejores vistas, nosotros lo recomendamos especialmente por la noche, tiene un ambiente único.

¿Qué tipo de comida podemos encontrar? En general mediterránea, jamón, gambas, croquetas, huevos rotos, rabas, ensaladas, pescados, carnes, arroces.. La carta podréis encontrarla en su web.

Como siempre, si os ha servido de ayuda la entrada u os ha gustado podéis dejarnos un comentario, o seguirnos en twitter y facebook para seguir actualizados con las nuevas entradas.

Y si tenéis pensado hacer una ruta por Cantabria podéis leer nuestras entradas de: San Vicente de la Barquera, Suances, Cabárceno, Santillana del Mar y Comillas ¡Nos seguimos leyendo!