Después del primer impacto de la noticia, que no por esperada duele menos, de la muerte de Santiago Carrillo, sigue siendo difícil entender, no ya la transición, sino la evolución desde la finalización de la ultima guerra civil de España, obviando a Santiago Carrillo. Se mezclan, creo que es inevitable, vivencias personales, vivencias de militancias políticas de juventud. Cuando Santiago volvió oficialmente a España, eran trabajadores de Pegaso los que se ocupaban de su "seguridad", compañeros de trabajo. Se estreno en Madrid ña película Zacco y Vanzetti, se aprovecho para una aparición publica de la oposición, allí estaba Carrillo y yo de "segurata" en una de las puestas de acceso al patio de butacas en el cine Bellas Artes de Madrid. Y bien orgulloso que estaba yo, que estoy.
Intentar escribir sobre un personaje como Santiago Carrillo, un personaje que ha estado en primera linea de la actividad política durante tantos años, sin empezar diciendo que tiene luces y sombras, cuando menos no seria justo. Santiago vivió como dirigente político, guerras, civiles y frías, estalinismo, reconciliaciones y purgas, le toco vivir y ser protagonista de eso también. Pero es indudable su aportación también y sobretodo a nuestra historia.
Quizás lo que mas resaltaría seria su constante aportación innovadora y compromiso con la izquierda. Desde sus años mozos con la JSU, hasta su apuesta por la 'casa común'.
Si es verdad que su aportación a la transición de la dictadura a la democracia es muy importante, también es vedad que fue de los primeros, a finales de los años 50, que planteo la necesidad de la Reconciliación Nacional como manera de superación de las secuelas de la guerra civil.
Sus criticas al estalinismo, su aportación a la necesidad de apertura a la sociedad de la izquierda, desde el eurocomunismo, desde sus opciones de acercamiento hacia fuerzas socialdemócratas, son quizás, las bases de un camino en el que hoy estamos todavía.
Si tuviera que quedarme con alguna imagen de Santiago Carrillo me quedaría con dos. Una en el congreso de fundación de la JSU, la otra de Santiago sentado en su escaño el 23 F, defendiendo sobretodo la dignidad ante los golpistas, nos estaba representando a muchos ese día, y el era consciente de eso.
Gracias Santiago.