Ya andaba yo un poco desconectado de los vaticinios de Becerra, cuando por casualidad di con este vídeo, en el que Santiago Niño vuelve a aplazar el “crash” a enero del presente año (y van…). Llamativo también que ahora se desdiga de que pronosticara crash alguno (hay que tener más cara que espalda, habiendo titulado su libro precisamente como “El crash del 2010″). También parece haber olvidado su ya mítica frase de “la caída a plomo”, con la que gráficamente quería poner énfasis en su teoría de que se produciría un empeoramiento económico fulminante y en caída libre. Ahora no solo lo desmiente con frases como “yo nunca dije que se produciría un hundimiento de golpe”, si no que se dedica como siempre a decir una cosa y la contraria; “iremos cayendo suavemente”, para luego añadir “en enero vendrá auténticamente la caída”.
En fin, que cada vez me parece más triste lo de este hombre, empeñado en mantener su discurso pase lo que pase para prolongar sus minutos de gloria en los medios.