por Lic. María Carmen Buelga Otero
Podemos considerar que en casi todos los aspectos de la vida se reciben los efectos, por lo menos indirectos, de algún tipo de organización. En las organizaciones se busca obtener alimentación, vivienda, educación y empleo. Estas atienden nuestras necesidades de protección, cuidado de la salud, seguridad, transporte, etc… Muchas de éstas organizaciones tienen fines económicos, otras no. Pueden ser muy grandes, medianas, pequeñas o negocios familiares.
No obstante esta diversidad, las organizaciones tienen algo en común. Son el contexto primordial del comportamiento organizacional. Las organizaciones dependen de las personas, al mismo tiempo que afectan la vida de las mismas. Por este motivo consideramos que la satisfacción de las partes interesadas, es clave para la efectividad organizacional. Para ello, la organización debe tener un sentido de comunidad. Es un espacio donde las personas interactúan emocionalmente unas con otras y no se sienten inhibidas de hablar acerca de lo que sienten, de los temores, desilusiones y aspiraciones. Dado que esta circunstancia les permite cuidar y contenerse mutuamente. Es un espacio donde existe una auténtica comunicación, disposición y compromiso para hablar de manera franca y respetuosa.
La motivación laboral de la persona está relacionada con la satisfacción en el trabajo y las relaciones que se dan de trabajo-familia. Es necesario puntualizar que la motivación no es independiente del ámbito laboral o la vida personal del empleado. Hay una relación dinámica entre la motivación, la satisfacción en el trabajo y las relaciones trabajo-familia. Vamos a clarificar algunas causales de esta relación.
Causas de satisfacción e insatisfacción en el trabajo
La satisfacción en el trabajo es una respuesta emocional y afectiva de la persona a diversos aspectos del trabajo que realiza. Lo que no significa que sea un concepto único, dado que un trabajador puede estar satisfecho con un aspecto de su trabajo e insatisfecho con uno o más aspectos adicionales. Esta área tiene consecuencias en la organización muy importantes, dado que la relación de satisfacción en el trabajo, con otras variables pueden afectar el desarrollo de la organización.
Por supuesto que la satisfacción en el trabajo es en primera instancia individual, pero la misma tiene influencia en la satisfacción del grupo. Se puede considerar a ésta como una actitud multidimensional y aplicar a cada una de las partes que componen el trabajo del individuo.
La satisfacción en el trabajo debe considerar diversos aspectos que son importantes y que en el trabajo predisponen al empleado a comportarse de cierta manera. Algunos aspectos de la satisfacción laboral incluyen el sueldo, el jefe que se tenga, la naturaleza de las tareas desempeñadas, los compañeros o el equipo y fundamental las condiciones de trabajo inmediatas.
Desde una perspectiva multidimensional de la satisfacción en el trabajo, hay que advertir que los responsables deben estar atentos a que una alta satisfacción del empleado en un aspecto, no se vea cancelada, por una alta insatisfacción en otro. Siendo necesario prestar atención a aquellos elementos que están directamente relacionados con el contenido del trabajo (naturaleza del trabajo) y aquellos que forman parte del contexto laboral (empresa, jefe y compañeros).
Sabemos que la satisfacción en el trabajo, es parte de la satisfacción de la vida, esto es debido a que el empleo constituye una parte importante de la vida de los trabajadores. Esta satisfacción o el nivel de satisfacción laboral dentro de los grupos no es constante, sino que está relacionada con diversas variables.
Una de las variables que consideramos de gran relevancia y que influye para que aparezca la insatisfacción en los trabajadores, se da en las organizaciones grandes. Estas tienden a abrumar a la gente, enredar los procesos de apoyo y limitan el grado de cercanía personal y amistad. Algunas de estas grandes organizaciones generan la insatisfacción en su personal, al no mantener la coherencia entre lo que dicen y lo que hacen.
Llegado este punto debemos analizar el clima laboral al que apelan las organizaciones y en función de qué parámetros es instrumentado. Considero que se debe abordar el análisis del clima laboral en la organización aceptando que este puede ser positivo o negativo. De acuerdo al mismo será el grado de satisfacción o insatisfacción de los empleados.
Muchas organizaciones que por tamaño exceden el ámbito local, constituyendo una empresa de carácter nacional, se sienten en el deber de mostrar hacia el interior (trabajadores) y exterior (clientes) un compromiso con sus empleados. Para ello, organizan jornadas de capacitación, con el fin de lograr la excelencia en la gestión del clima laboral. Es interesante pensar que es para la organización la gestión del clima laboral, puede ser que lo asignen a la comunicación interna, el liderazgo, el reconocimiento y el desarrollo laboral y personal de todo el personal. Pero como alcanzar esta propuesta, cuando la realidad cotidiana tapa lo importante con lo urgente. Maximizar las ganancias de la empresa, exigiendo a los empleados cumplir con objetivos que en muchos casos excede la naturaleza de su trabajo. Aclaramos que el establecimiento de objetivos es importante y un factor motivacional, pero estos tienen que tener un significado personal, para que se lo enfoque en lo pertinente e importante.
Estas iniciativas, que en su espíritu pueden ser loables, en la mayoría de los casos no se visualizan o se aplican en la gestión diaria. Si bien, reconozco el esfuerzo de algunos responsables del Área de Recursos Humanos para instrumentar un mejor clima laboral, desarrollando actitudes y aptitudes en los líderes y así, estos puedan impulsar la satisfacción de sus colaboradores y reconocer también, su responsabilidad en la satisfacción de los mismos.
Todas las organizaciones tienen Valores, cabe preguntarse cuales son los valores de la misma y porque causa se deben realizar programas para trasmitir los mismos, tal vez por que estos no se ejercen. Se despliega un discurso de compromiso y valorización del personal, se propone mejorar el balance entre la vida personal y la laboral. Ahora, cómo se mejora ésta, si al empleado/a no se le respetan las horas de trabajo que marca la Ley y tampoco las que exceden el horario son pagadas.
La experiencia laboral como consultor independiente, motivó a describir, un tanto someramente, la insatisfacción que se genera en los empleados de las organizaciones, al no trabajar en un clima laboral positivo. Clima que se organiza desde la cultura organizacional, los valores que esta sustenta y el compromiso de los líderes y colaboradores para afianzar el respeto a las personas que trabajan en la organización.