Marissa Meyer • 478 Pág. • Crónicas Lunares II • Montena • 16.95€(Puntuación: 3.5/5) ·★★★★★
Hace dos semanas la abuela de Scarlet desapareció sin dejar rastro. Ella sospecha que la han secuestrado, así que cuando la policía renuncia repentinamente a seguir con la
investigación, toma la decisión de continuar la búsqueda por su cuenta, aunque esto implique introducirse en los bajos fondos de su ciudad... Allí tropieza con Wolf, un feroz luchador callejero que quiere ponerle las cosas difíciles. Pero Scarlet no es el tipo de chica que se amedrenta ante un matón, por muy atractivo que sea, así que, cuando se da cuenta de que él puede ser la única conexión con los secuestradores de su abuela, no dudará en pedirle ayuda.
Juntos deberán sumergirse en el oscuro y peligroso mundo de la mafia. Y descubrirán que su historia está irrevocablemente unida a la de una cyborg, llamada Cinder, que se encuentra en busca y captura en todo el planeta.
Anteriormente ya os hablé de la primera entrega de esta saga, y hoy vengo a contaros qué me ha parecido la segunda, pues me quedé con las ganas de saber más y fui a leer la segunda inmediatamente.
Debo decir que Scarlet me ha gustado menos que Cinder. Con Cinder fue empezar y no poder parar, pero con Scarlet hubo que tirar un poco más. Me ha gustado todo, sí, pero el principio se me ha hecho denso, y es que el comienzo va con lentitud y se desarrolla a paso de tortuga. No obstante, luego de unas cuantas páginas vuelve a enganchar tanto como su predecesor, pues la trama se hace interesante y apasionante.
Nos encontramos ante un pequeño pueblo situado en un rincón de Francia, donde viven los Benoit. Allí habita una jovencita llamada Scarlet quien cuida una granja, ajena a todo lo que está pasando en el mundo, pues la búsqueda de su abuela desaparecida desde hace dos semanas le tiene muy ocupada. En un mundo donde por una parte la letumosis, una patologia letal, sigue cobrando la vida de muchos inocentes, y por otra la malvada reina lunar, Levana, amenaza con romper el bienestar internacional del planeta.
Scarlet, muy a pesar de saber que los caminos son peligrosos y es mejor no dejarse ver ante nadie, pero sobretodo nunca ante aquellos que son desconocidos, se encuentra con un chico un tanto peculiar llamado Lobo que se ofrece a acompañarla en la búsqueda. Juntos emprenderán un viaje que acabará llevándolos a una misteriosa ciborg quien tiene muchas cosas por contar.
¿Cómo conseguirá la autora unificar la historia de Cinder y la de Scarlet? ¿Cinder seguirá participando en la historia? ¿Cómo se desarrollara esta nueva entrega, donde el olor a la caperucita roja está impregnado por todos lados? Éstas eran algunas de las dudas que tenía antes de comenzar a leer la novela. Pero de nuevo, Meyer vuelve a impresionarme, ésta vez creando una historia mucho más elaborada y compleja.
Lo que me ha gustado
• Lo quiero oír de nuevo, pero que sea diferente.
Al igual que dije en la anterior reseña, Meyer sabe muy bien captar la esencia de un cuento tradicional y adaptarlo a sus propios personajes y tramas. Scarlet se basa en caperucita roja, que lo representan a través de su cabellera escarlata. Luego tenemos al lobo malo malote, que no es ni malo ni malote: Wolf. Se nota que la autora sabe y conoce de lo que habla, de manera que logra totalmente encajar todas las piezas y convertir un fairytale tradicional, en una novela distópica exactamente cómo consiguió hacer con Cinder.
• ¡Qué maravilla de lugar!
De nuevo vuelve a ser la ambientación de la novela lo que me cautiva y me engancha. Esa ambientación tan lograda, rica en detalles y en personajes (el elenco es fantástico). Ya me quejé en la anterior reseña sobre lo poco que llegabas a saber sobre las costumbres de Nueva Pekín, pues dejadme deciros que en Scarlet llegamos a saber más, y es algo que se lo agradezco a la autora.
“-Si fueras un caballero, me habrías invitado a uno.
-Si fueras una dama, habrías esperado a que te invitara.”
• ¡Una premisa excelente!
Tenía miedo de que Cinder no apareciera más en esta entrega, pues me gustó mucho su personaje. Desde las primeras páginas vemos que tenemos dos protagonistas fuertes y valientes, que luchan por todo aquello que quieren. Cada una tiene sus mil y un defectos, pero se unen y son más invencibles que nada.
• ¡Qué elenco más delicioso!
Nos encontramos ante una novela que combina tanto papeles principales como secundarios de una forma única. Gracias a eso logran que la historia vaya cobrando su máxima resplandor y lo que antes creíamos un trozo irreconocible y poco útil, se convierte en la pieza más culminante del juego.
Lo que no me ha gustado
• Scarlet, no eres tú. Soy yo.
Scarlet me ha gustado menos que Cinder, y el problema es que no he podido congeniar con la protagonista, la chica del pelo escarlata. Ella me ha parecido muy cabezota, y sus acciones, sin sentido. Si te dicen que no vayas o que no hagas eso, pues chica no lo hagas, que luego te puede traer problemas, y de los gordos. Pero no, ella toma sus acciones sin pensar, por eso le pasa lo que pasa. A diferenciar de Scarlet, Wolf me ha parecido un personaje demasiado adorable y poco feroz.
• ¡Ep, para el carro!
La relación entre Scarlet y Wolf me ha parecido demasiado forzada, para decirlo de algún modo. No he visto el desarrollo, y tampoco le he encontrado sentido. Desde el primer momento ya hueles algo sospechoso sobre Wolf, la forma en la que habla, las coincidencias, la cantidad de cosas que sabe sobre ella (no me digáis que no os huele a gato encerrado?). No sé porque pero a mí su relación no me ha convencido.
No niego que Scarlet es una estupenda continuación de saga, con mucho misterio y giros de tramas inesperados, pero no he podido sentirme satisfecha al acabar de leerlo. He encontrado los personajes planos, un romance superficial, que ha ido de prisa, sin evolución, directa.
En definitiva, Scarlet es la segunda entrega de Crónicas Lunares, un libro recomendable, sí, aunque no ha sido lo que me esperaba. Introduce un nuevo enfoque en la aventura ya emprendida por su predecesor, pero con otros personajes. Es innovador, y con dosis de misterio y acción.