Y bueno, finalmente acabó el “sueño”, ahora a despertar para la realidad. Vamos a enfocar nuestra mente, nuestra inteligencia y nuestra capacidad crítica hacia nuestras necesidades urgentes.
Entre esas necesidades urgentes están, en este momento, hacer un estudio minucioso del perfil de cada candidato que se están presentando para “tocar” el presupuesto municipal en todos los municipios del país, de esta elección podremos deducir cuánto hemos cambiado en realidad en nuestra visión de la importancia en la política del país.
En estas elecciones veremos si hemos sido capaces de “crecer un poco” política e intelectualmente para poder convertirnos en verdaderos electores y dejar ya de hacer el papel de “votantes” que solo legitiman los poderes digitados. En estas elecciones podremos, finalmente, dejarles un claro mensaje a los cleptomaniacos que ya no podrán manipular nuestros votos para seguir robando, en estas elecciones podremos dejar bien sentada nuestra posición de “vigilantes” de los intereses comunitarios más que de partidarios personalistas. Sobre todo debemos dejar bien en claro que ya no se tolerará la impunidad en los desvíos de verbas municipales para cuestiones electoralistas demagógicas.
Me encantaría que en el país hubiera tantos “expertos” en política como los hay en materia de fútbol, que haya una visión tan crítica y detallada que mueva a la indignación como para manifestarnos y poner en claro nuestra posición, incluso con la manipulación de la información, como ocurre con las informaciones deportivas, que la gente priorice las paginas político – económicas de los periódicos a las de deportes y chismes, de manera que “conozca” todos los perfiles políticos y los discursos de los políticos, tal como recuerdan cada partido jugado, cada error cometido por cada jugador y cada árbitro, así como de los diferentes dirigentes de los clubes de fútbol.
Ahora nuestra prioridad es el país, el fútbol hace parte de la diversión y no contribuye a solucionar el acuciante problema social del Paraguay. Les ruego a los fanáticos del fútbol a mirar a quienes “pretenden” hacernos creer que “trabajarán por el país” con el mismo ojo clínico con el que mira a los jugadores de fútbol, talvéz así consigan ejercer su derecho a elegir con un poco más de coherencia.