Vais andando por la calle, con vuestro hijo/a, un sábado por la mañana. Es un buen niño/a, se comporta bien, come bien, duerme bien, pero tiene una pequeña manía.Tu niño mira, tu lo miras a él con cara de “no serás capaz de hacerlo otra vez”, te devuelve la mirada diciendo “si mami, sabes que soy capaz”, y antes de que te des cuenta ha salido corriendo. PEPITOOOOOOOOO ¡ vuelve con tu madre ahora mismo!. ¡Cuando hable con tu padre verás! ¡Vas a recibir más palos que una estera!(Todo esto se lo dices corriendo y jadeando claro).
¿Qué hacer?
- Dejarle el hábito, así haces deporte tu y tu hijo, te entrenas y quien sabe si puedes ir a las siguientes olimpiadas. Además él así entrena los “sprints” y ¡quizá llegue a ser el próximo Usain Bolt!
- Llevarlo atado al carrito siempre que salís, al estilo camisa de fuerza, “¡a ver si así es capaz de escaparse el petardo!”.
- Comprarle una correa para niños, a modo de mascota, así, seguro, seguro que no se te escapa. Las pregunta sería ¿hasta qué edad piensas llevar a tu niño atado a una correa? ¿Qué pensará cuando vea al primer perro atado a una correa por la calle y vea la similitud? (os pongo una imagen porque las correas para niños/as EXISTEN) http://latrola.net/blok/pasear-a-los-ninos-atados-con-una-correa-36-fotos
- Darle una explicación de “padre muy señor mío” ¡para que se asuste y no lo haga más!. Esto es, “si sales corriendo y un coche no te ve, te puede pillar, salir volando, caer en la otra acera, hacerte sangrecita (lo pones en diminutivo para rebajar la tensión, ¡que buen padre/madre eh!) yyy entonces te tendremos que llevar al hospital, el médico te pinchará muchas muchas veces (sabes que tu hijo odia los pinchazos) y no podrás jugar a tus juegos ni ver a tus amigos”.
- Ponerle un castigo ejemplar. “¿Quieres correr? Pues ahora vas a correr”y darle una bolsa de maíz y ponerlo delante de un corral de pollos (ver vídeo más abajo por favor)
- ¿Intentar algo diferente que no hayas hecho antes?
Bien, si has elegido la última te invito a seguir leyendo. Si tu niño/a sale corriendo de al lado tuya siendo muy pequeño es, probablemente, porque lo ha tomado como un juego. Sin embargo, sabemos que ese juego puede ser peligroso en determinadas situaciones. Eres tu quien debes explicarle, como padre/madre, lo que está bien y lo que está mal y por tanto ¿Cómo hacer para que tu hijo/a no salga corriendo de al lado tuyo cuando sales a pasear? Se puede atajar en 4 sencillos pasos:
- Explicación, siempre necesaria. Dile que cuando salgáis él debe permanecer al lado de mami/papi y que por lo tanto si sale corriendo papá y mamá se enfadarán. Explícale que es peligroso(sin entrar en los detalles escabrosos que hemos puesto más arriba por favor, con decirle que es peligroso vale)
- ACTUAR. Si sale corriendo es necesario que lo sujetéis lo antes posible y le expliquéis (que se os note un poco enfadados) que ahora cómo consecuencia deberá estar 5 minutos con la mano cogida a mami/papi. Probablemente llorará pero vosotros deberéis cumplir con vuestra consecuencia.
- Premiarlocuando no sale corriendo. Esto significa que las primeras veces que está cerca de vosotros sin salir corriendo y sin estar cogido de la mano lo reforcéis. ¿Cómo? Con un simple “cariño, estoy muy contento/a de que estés cerca de mamá y papá, ya te estás haciendo mayor” acompañado de un beso y un abrazo.
- ¿Si vuelve a ocurrir?Volver al paso 2.
Prohibido, Nunca, NeverCómo ya he dicho, cuando déis las explicaciones de por qué no puede salir corriendo no entréis en detalle en las posibles consecuencias que pueden pasar si lo hace. Las explicaciones sobran cuando ya se han dado, después, es necesario ACTUAR.
Cuando conseguís pillar a vuestro niño/a decirle riéndonos “ay que pillo eres ja ja ja”, si no se nota que estamos enfadados él/ella no notará que salir corriendo es peligroso. Sinceramente, padres y madres del mundo, si hacéis esto que sepáis que casi es más preferible lo de la correa.
Más vale prevenirEn este caso la prevención es la ACTUACIÓN. Es decir, normalmente no se sabe si nuestro hijo/a va a salir corriendo pero es un comportamiento que hay que corregir cuando sucede.