Se escribe poesía
como se ama,
con heridas abiertas
con la tinta de la sangre
con la pulsión de los sentidos
desde las entrañas
Se escribe poesía
como se ama,
con el sabor de lo amargo
filtrado por la dulzura de las palabras
dejándote la piel en cada verso
sabiendo que las palabras no compensan
Se escribe con la vida palpitando
entre el corazón y el papel
muriéndose una de amor
o de desesperación
atendiendo a las sinrazones
de volcanes en erupción
bajo la escarcha de la palabra.
O se escribe así
o no se escribe.