Revista Cine
Sueños de Libertad(The Immingrant, EU, 2013), de James Gray. El más ambicioso filme que haya dirigido Gray hasta el momento y, acaso, ¿el más logrado? Se trata de una mixtura entre unwoman's film clásico y un melodrama social que, además de una producción impecable, presume la belleza y elpathosde la mejor Marion Cotillard, y una hipnótica actuación de Joaquin Phoenix.Mi crítica en el Primera Fila delReformadel viernes pasado.
Volando Bajo(México, 2014), de Beto Gómez. El sexto largometraje del sinaloense adoptado tapatío Beto Gómez es un fracaso curioso, por decir lo menos. Estamos ante una película que, por un lado, intenta ser una amable parodia populachera de la música y el cine nacionales de los años 70/80’s. Por el otro, pretende construir una entrañable historia de amistad entre dos músicos bajacalifornianos, Chuyín Venegas (Gerardo Taracena) y Cornelio Barraza (Rodrigo Barraza), desde su infancia hasta la separación del dueto y la muerte de uno de ellos.En ninguna de las dos instancias el filme funciona, aunque hay varios elementos sueltos dignos de alabarse, como la interpretación de Ludwika Paleta como una adorable güera de rancho, el perfecto manejo del acento del Pacífico por todo el extendido reparto y, sobre todo, el ingenioso diseño visual de la cinta -foto de Daniel Jacobs, edición de Viviana García-Besné-, que reproduce con graciosa precisión programas televisivos, videoclips y chafísimas películas populares de los 70/80.