Revista Cine
Una Niña Maravillosa (Beasts of the Southern Wild, EU, 2012), de Benh Zeitlin. Vista en Morelia 2012, la opera prima de Zeitlin se coló en mi lista de lo mejor del año pasado. Estamos antes la exploración lírica de un ethos muy particular: el de un pequeño grupo de habitantes del "Bathtub", una paupérrima y libérrima zona ficticia ubicada en algún lugar del bayou de Louisiana. Esta gente está acostumbrada a vivir y morir rodeada de agua, cantando, comiendo, tomando. No saldrán de ahí, por más que el gobierno intente una y otra vez desalojarlos. Y no llorarán por su muertos, porque como le dice, le grita, le exige Wink (Dwight Henry) a su irrefrenable hija de seis años Hushpuppy (Quvenzhané Wallis, la revelación del año), ella tiene que aprender a sobrevivir en un mundo de animales salvajes.
La Noche Más Oscura (Zero Dark Thirty, EU, 2012), de Kathryn Bigelos. Pocas veces ha quedado más claro el discurso bélico/revanchista/supremacista del Imperio gringo. Y, al mismo tiempo, no recuerdo una mejor película sobre el tema, por lo menos después del 11 de septiembre de 2001. ¿Es la mejor película que ha dirigido la Bigelow hasta el momento? Puede ser. Y, también, la más provocadora y repelente. Mi crítica en el Primera Fila de Reforma del viernes pasado.
Asalto al Cine (México, 2011), de Iria Gómez Concheiro. Exhibida hace dos años, en Guadalajara 2011, finalmente merece estreno -aunque solo en la Cineteca Nacional- la opera prima de Gómez Concheiro. Se trata de una crónica juvenil sobre cuatro muchachos de la colonia Guerrero chilanga que, nomás porque sí, deciden robar un cine. A la película le sobran algunas escenas, pero el reparto juvenil (el ubicuo Gabino Rodríguez y varios jóvenes de esa misma colonia) es magnífico, los diálogos son muy vivaces, la secuencia del robo al cine está bien montada y, en general, la impresión que deja Gómez Concheiro es que se trata de una cineasta con un pulso seguro y firme a la hora de contar su historia.Creo que la película merecía una distribución más amplia. Pájaro Azul (Blue Bird, Bélgica, 2011), de Gust van den Berghe. Exhibida en el 30 Foro de la Cineteca del año pasado, este relato infantil filmado en Togo con actores no profesionales -y basado en la obra teatral homónima de Maurice Maeterlink-, cuenta la historia de dos hermanitos -niño y niña- que van en busca del pájaro azul del título que se les escapó. En el camino, se encuentran con sus abuelos ya fallecidos, con espíritus diversos y hasta con los niños próximos a nacer. Bien filmada en tono azul monocromático, la cinta se deja ver, aunque incluso sus escasos 82 minutos parecen demasiados. Estrenada en la Cineteca.
Los Miserables (Les Miserables, GB, 2012), de Tom Hooper. No entiendo el éxito teatral de Los Miserables: tiene una sola canción pegajosa y, por lo menos en la versión fílmica de Hooper, apenas un par de números musicales dignos de llamarse así. Pero, bueno, Anne Hathaway está impresionante en su número musical de lucimiento, Hugh Jackman no está mal y Sacha Baron Cohen y Helena Bonham Carter se roban cada escena en la que aparecen. Por desgracia, aparecen muy poco. Escribiré más de esta película en los próximos días.