Se me han extraviado los poemas.
Los busco en todos los rincones de la habitación.
Por el dolor, no sé como anotar
un dolor, ya no sé nada de nada.
Sé que no se puede hablar así, sin ton ni son,
ha de ser más mordaz, una metáfora picante.
tendría que ocurrírsele a uno. Pero con el cuchillo en la
espalda.
Parlo e tacio, parlo, me fugo en un idioma
en el que sale hasta algo español, los toros y
los planetas, se puede escuchar quizá aún
en un disco robado. Con algo de francés
también va, tu es mon amour depuis si longtemps.
Adiós, palabras bonitas, con vuestras profecías.
Por qué me habéis abandonado. ¿No estabais a gusto?
Os he depositado junto a un corazón, de piedra.
Realizad allí para mí, Aguantad allí, realizad allí para mí
una obra
He perdido los poemas
no ellos solo, pero primero.
Los poemas se han perdido
no solo ellos, pero primero el poema
luego el sueño, luego la
Todo perdido, los poemas primero
luego el sueño, luego también el día
luego también todo aquello que había durante el día
y lo que durante la noche, entonces, cuando ya nada
más, más perdido, seguí perdiendo
hasta que fue menos que nada y yo ya no fui
y no fui nada de nada.
La retirada ha de ser una retaguardia interior
con todos los años documentados y los lugares vistos
aún ante los ojos, ya que la tierra
ya no y ninguna ignominia, entonces,
atrás * , todavía un espacio
extensiones rodeadas por garras volantes para sordos, mudos
Extensiones ** claras, largas como gritos para él
la llegada, enmudecido .
Para el enmudecido, el yermo
con el tejido comprensible
que suavemente envuelve su locura en un capullo
hasta que pinta el hotel de vidrio
* N.T. Otra posibilidad de leer esta palabra sería "invierno".
** Otra posibilidad de leer esta palabra sería "palabras".
Ingeborg Bachmann. "No sé de ningún mundo mejor".
Publicación póstuma de algunos poemas y esbozos de la poeta, ensayista y narradora austriaca fallecida en Roma en 1973.