Cada vez tenemos más dificultades para llegar a fin de mes, por lo que a veces es imposible pagar la cuota anual de nuestro seguro, algo que es especialmente grave si el seguro que dejamos de pagar es de coche o el de moto.
Por eso, antes de dejar de pagar hay que plantearse la posibilidad de fraccionar el pago, algo que permiten la inmensa mayoría de compañías de seguros. Si la tuya no lo permite no vas a tener problemas para encontrar alguna que si lo haga.
Pagar un seguro a plazos
Por ejemplo, Balumba, Caser o Mapfre, por nombrar alguna de las aseguradoras más conocidas, aceptan el pago fraccionado, aunque estos pagos no son iguales en todas las compañías de seguras.
Lo normal es que se acepte el pago semestral, pero dadas las dificultades económicas en la actualidad en muchos casos ya se acepta el pago cada tres meses, con lo que la cuota del seguro es más llevadera.
En estos casos se suele aplicar un recargo, que es mayor si pagamos cada tres meses que si lo hacemos cada seis, que es el precio que tenemos que pagar por pagar de forma más cómoda. De todas maneras, eso se puede negociar con la compañía de forma que el recargo se puede eliminar o al menos rebajar.