En Santiago del Estero, a principios del siglo XX, trabajaban tres logias. Hoy son cinco. "Esto marca un enorme crecimiento", sostuvo.
Alejandro Ramos Vila, Gran Segundo Vigilante de la Gran Logia de la Argentina de Libres y Aceptados Masones, confirmó a EL LIBERAL el incremento de personas interesadas en formar parte de las logias masónicas que funcionan en Santiago del Estero.
Ramos Vila, quien participó de una charla pública en ciudad Capital, dijo: "Hay un proceso de cambio o lo que nosotros decimos que nuestros talleres están en constante crecimiento, hay trabajo y se siente el ruido de los talleres masónicos en la sociedad santiagueña".
Previamente, explicó: "En Santiago del Estero, a principios del siglo XX, trabajaban tres logias. Al final del siglo pasado trabajó solo una logia. A principios del siglo XXI trabajaron dos, tres y hoy son cinco. Evidentemente, esto marca un enorme crecimiento".
El Gran Segundo Vigilante, oriundo de Córdoba, recordó que antes de ostentar el cargo que hoy tiene en la Gran Logia de la Argentina de Libres y Aceptados Masones, se desempeñó como Consejero Zonal, cuya área de influencia comprendía a Córdoba y Santiago. "En estos sectores hemos trabajado con muchas propuestas que son de enorme interés para la sociedad. Nosotros tenemos institutos a través de los cuales se promulga el laicismo educativo, social y cultural", especificó el médico cordobés, de 41 años de edad.
Ramos Vila puntualizó que este crecimiento en Santiago, en particular, y en la Argentina en general, donde la institución que representa triplicó la membrecía, tiene que ver "con la posición de apertura mucho más amplia y de exposición de nuestros ideales".
Destacó que este salir públicamente hacia la sociedad es una modalidad adoptada desde hace diez años atrás.
"En nuestra institución no son las personas sino los ideales los que se tratan de llevar adelante, perfeccionado siempre la ética y la moral del individuo", dijo.
"Nosotros tenemos fama de oscurantistas, cuando en realidad es todo lo contrario. A lo largo de la historia, cuando se perseguía a la ciencia, los científicos se refugiaban en la masonería. Así que, de oscurantistas no tenemos nada?, enfatizó.
Luego, puntualizó que en la Argentina, históricamente, ?siempre ha trabajado nuestra institución. Nunca ha trabajado políticamente porque no es un partido político y no es una religión sino que es una institución con personería jurídica, con estructuras, con formas y con autoridades electas democráticamente".
"No somos un partido político, pero sí hay gente de distintos partidos políticos que participan de nuestra institución. La única participación política que tuvo la masonería a lo largo de la historia como institución fue en la aprobación de la Ley 1420, de educación común, laica, gratuita y obligatoria, donde se creó una logia, la logia docente, que trabaja en la actualidad ", especificó el Gran Segundo Vigilante.
Fuente; El Liberal