Alan Cabrera, de 17 años se hizo un disparo en la frente, según informaciones preliminares. El jovencito había intentado por lo menos en dos ocasiones anteriores quitarse la vida.
Víctor Arias, tío de la víctima, dijo que el adolescente, de 17 años era un niño normal y que estaban casi firmándolo porque jugaba béisbol.
Dijo desconocer las causas que provocaron la tragedia.
El hecho se produjo alrededor de las 9:00 de la mañana, pero no fue hasta pasadas las 2:30 de la tarde cuando la fiscal adjunta, del Departamento de Homicidio, Cándida Ramos, ordenó el levantamiento del cadáver.