Se vende mamá, de Care Santos e ilustraciones de Andrés Guerrero

Se vende mamá de 38 años, seminueva, bastante guapa. Le sale muy bien la lasaña, la pizza de cuatro quesos y los crepes de sobrasada.

Es muy cariñosa y tiene la voz agradable.

Casi nunca regaña.

¿Qué por qué la vendo? Porque desde nació el garbanzo, a mí ya no me quiere igual.

Se vende mamá es un libro que se aleja bastante de lo que suele aparecer por el blog, pero es no he podido resistirme a enseñaros este divertidísimo libro. Aunque conocía de su existencia (es la obra ganadora del Premio El Barco de Vapor del 2009) no me interesé en él hasta que estaba buscando qué libro regalar a mis primos pequeños (fomentándoles el buen gusto por la lectura) y de pronto apareció entre mis manos.

Un impulso fue lo que hizo que me lo llevara a casa, lo hojeé, leí el primer capítulo, lo envolví con papel de regalo y salí hacia la biblioteca dispuesta a coger una copia para leerla, porque ese primer capítulo fue lo más tierno y divertido que he leído en mucho tiempo. La historia comienza con un anuncio en una conocida web de venta e intercambio, Óscar piensa en cómo plantear el anuncio en el que vende a su madre, mientras Nora, su mejor amiga, le da unas breves lecciones de marketing. ¿Por qué Óscar quiere venderla? Desde que nació su hermano pequeño se ha sentido bastante desatendido y cree que ya no le quiere. A lo largo de la historia, Óscar se encontrará con una serie de personajes que le harán recapacitar sobre su decisión, quizá vender a su madre no es una buena idea…

Como veis es una historia sencilla que Care Santos la envuelve de ternura y risas. Los más pequeños verán en Óscar y en Nora unos personajes con los que sentirse identificados, porque más de uno, cuando su madre más los regañaba, habrá pensado en cambiarla, un pensamiento inocente que Óscar decide llevar a cabo. Es divertidísima la lista que el protagonista hace sobre las cosas horribles que se empeña en hacer su madre o la de frases odiosas que suele decir. Para los mayores es una lectura muy entretenida ya que hay más de una frase que nos transporta a nuestra infancia. Un aplauso para Care porque ha introducido a una familia diferente a la tradicional, Nora vive solo con su padre, el cual apenas está por casa debido a que es un presentador de televisión muy conocido, con todo lo que ello comporta: viajes, novias, etc. Me ha parecido muy acertado incluirlo ya que muestra a los niños que no todas las familias son iguales, aunque sigan siendo una familia.

Siendo un libro destinado a niños y niñas de siete años en adelante, la ilustración tiene un peso fundamental, y Andrés Guerrero junto con Ediciones SM han hecho un trabajo maravilloso. Sin las ilustraciones el texto no tendría el valor que tiene y viceversa, y la edición está tan cuidada en detalles que da gusto pasar de página. Al ser tan importante –y porque se lo merece- he decidido que en los próximos días tendréis de vuelta a Se vende mamá para enseñaros la edición y sus ilustraciones.

Pero la historia de Se vende mamá no queda ahí porque Care y Andrés han vuelto a unirse para crear Se vende papá y Se vende garbanzo. Estoy deseando leerlos (y regalarlos).