Uno de los acuerdos entre el kirchnerismo y el PRO, verá la luz en los próximos meses cuando el gobierno nacional anuncie la decisión de terminar de traspasar la justicia penal que actúa en la Ciudad de Buenos Aires a la órbita del poder judicial porteño.
Si se concreta, tras otro acuerdo entre Cristina de Kirchner y Mauricio Macri, es probable que también la Legislatura debate los distintos proyectos de ley que proponen instaurar el juicio por jurados. Ese menú se completó con el envío de una iniciativa por parte del Consejo de la Magistratura que conduce Juan Manuel Olmos.
El proyecto de ley impulsa, a la cordobesa, que el jurado esté integrado por 12 miembros sorteados entre los ciudadanos que deberán dar un veredicto por unanimidad. La modalidad se aplicaría solo para los delitos con más de 8 años de prisión.
Hasta ahora la ciudad solamente puede juzgar la portación de armas de guerra como figura penal a la que se le aplica una condena de ese tipo, pero le sería transferido el resto de los delitos en los que interviene el fuero penal.
Aún hay un convenio sin llevarse a la práctica que le transfirió más potestades a la Ciudad de Buenos Aires pero que la Legislatura no refrendró. Entre ellos el juzgamiento de presuntos hechos de corrupción por parte de funcionarios públicos.