
Este nuevo disco duro tiene un tamaño de 2,5 pulgadas, recomendable para equipos portátiles, y se puede adquirir con capacidades de 250, 320 y 500 GB, incorporando todos los modelos interfaz SATA2 y una pequeña memoria flash (SSD) de 4 GB.
Esta pequeña memoria no se suma a la capacidad total del disco duro, sino que actúa como memoria auxiliar (búffer) del disco duro, siendo este funcionamiento totalmente transparente para el usuario e independiente del sistema operativo que se usa, dado que es el propio disco el que se encarga de gestionar esta tarea moviendo a la memoria flash los bloques más usados del sistema operativo instalado en la máquina.
Según palabras del propio fabricante, estas nuevas unidades ofrecen grandes mejoras de rendimiento con respecto a unidades tradicionales. En cuanto el precio, la unidad de 500 GB tiene un coste de 156 dólares.
Vía: Xataka