California 83 cuenta básicamente las aventuras (y desventuras) de un adolescente español que va a Estados Unidos con una familia de acogida para estudiar COU. El libro se publicó hace ya bastante tiempo, en concreto en 2008, pero en diciembre del año pasado Booket lanzó una nueva edición de bolsillo.
La historia avanza entre situaciones incómodas y absurdas de las que el protagonista (Pepe en España, “Pipi” o “Joe” en su nuevo hogar) siempre consigue salir ileso de alguna manera. Todo está impregnado de ese humor escatológico e inteligente que caracteriza a su autor, Pepe Colubi. Este escritor, humorista y guionista es conocido, entre otras cosas, por participar en Ilustres Ignorantes (Canal +), y colaborar en diversos medios escritos como El Jueves o Rolling Stone.
La novela mezcla los ingredientes básicos de la típica historia de desfase adolescente: fiestas, alcohol y sexo, pero funciona perfectamente desde el punto de vista del público adulto, por lo menos, del público adulto español. Es fácil identificarse con ese adolescente lleno de imágenes estereotipadas de la vida americana. Su visión de Estados Unidos (formada a base de pelis, publicidad y videoclips) es, en gran medida, nuestra visión de Estados Unidos. De ahí que los giros absurdos con los que se confirman o desmienten esos estereotipos consigan un efecto de humor surrealista que mantiene la historia en pie.
Otro punto fuerte del libro es el uso de referentes cinematográficos y musicales, que funcionan como parte imprescindible de la historia. Las referencias culturales pueden perjudicar al relato si se usan de manera gratuita pero aquí se ensamblan con las experiencias (internas y externas) del protagonista. Su vida en América es también la música, el cine y la televisión de América.
En el caso de la música las referencias son más directas y evidentes. Las canciones que están sonando en cada momento forman parte de la descripción de los ambientes y de las situaciones. Pero además, la música se convierte en una manera de ubicar al lector, es decir, muchas veces el paso del tiempo viene marcado por los éxitos musicales del momento (por ejemplo, diciembre y el estreno mundial del videoclip de Thriller). También determina la estructura de la novela pues cada capítulo lleva el título de una canción (Cum on feel the Noize, total eclipse of the heart, wanna be starting something etc.).
En cambio, la cultura audiovisual aparece como un mecanismo de escape del protagonista ante situaciones de tensión, es decir, se encuentra en su mente más que en el mundo externo. A Pepe le pueden faltar muchas cualidades pero le sobra imaginación. Muchas veces la realidad se mezcla con los pensamientos made in América de este personaje que, en situaciones conflictivas (una bronca de su madre americana, algún que otro problemilla con la policía…), se adelanta a los acontecimientos imaginando desenlaces que bien podrían formar parte de una película de Clint Eastwood.
Colubi sabe sacarle partido al conocimiento que cualquier español tiene de la cultura de masas americana, y también a ese choque cultural entre una España obsoleta y una América en la vanguardia del mundo. Consigue establecer un vínculo con el lector porque recurre permanentemente a lugares comunes y los renueva con el sello ácido que caracteriza su humor.