Secuestros virtuales

De las estafas que nos podemos encontrar a diario y de las que podemos ser víctimas en cualquier momento, son los llamados secuestros virtuales, una de las estafas que probablemente nos causen más daño psicológico.

Recibir inesperadamente una llamada de supuestamente nuestro hijo, nuestra pareja, nuestros padres, diciéndonos que han sido secuestrados y que si no pagamos inmediatamente cierta cantidad de dinero van a sufrir serios daños, es algo que nos impacta emocionalmente de forma contundente.

Y precisamente con ese estado emocional de estrés es con lo que cuentan los estafadores para completar su negocio. Pues ellos se apoyan básicamente en dos puntos:

1. 1. El miedo que nos entra al saber que un ser querido está serio peligro.
   2. Y que el daño que recibirán va a ser immim¡gente si no se paga ya.

No hay duda de que en ese estado emocional de estrés nuestra mente no es capaz de pensar correctamente, de tal forma que cualquier voz que oigamos por el auricular de nuestro teléfono pidiendo ayuda lo interpretaremos como la de nuestro familiar y daremos sin querer datos nuestros o de nuestros familiares, sin pensar y de forma inconsciente, que los estafadores utilizarán como si los hubieran obtenido ellos mismos del familiar amenazado.

Y más trucos que utilizarán en su favor sin que nuestra mente, en ese estado de shock, sepa discernir entre verdad y estafa. Así pues, te dejamos algunas recomendaciones que debes tener presente ante estas situaciones y que seguro te ayudarán a manejarlas de forma más efectivas.

10 consejos frente a llamadas de secuestros virtuales

1. 1. Precaución con llamadas desde numeración oculta o prefijos desconocidos: Cualquier llamada con numeración oculta, prefijos desconocidos o números que no tenemos en nuestra agenda, nos tiene que poner sobre aviso a la hora de descolgar nuestro teléfono. Puede ser que sea una llamada inofensiva de algún comercial, etc. pero tal vez no, tal vez sea alguna estafa, y precisamente por eso hay que estar alerta.
   2. Mantenga una comunicación calmada y serena: Cuando descolgamos nuestro teléfono móvil deberemos concentrarnos en prestar la máxima atención al interlocutor: acento que tenga, con que saludo inicia la conversación, que es lo que nos dice, etc. y sobre todo mantener la calma y la serenidad a pesar que el interlocutor asegure haber secuestrado a algún ser querido y amenace con hacerle daño. Usted debe ser consciente que el 99% de estas llamadas son estafas para sacar el dinero de una forma fácil y rápida.
   3. Escuchar y dejar hablar a nuestro interlocutor, grabando la conversación si es posible: No debemos precipitarnos en responder. Hay que dejar hablar al interlocutor y como hemos apuntado anteriormente prestar la máxima atención a lo que nos dice y cómo nos lo dice. Si es posible grabaremos la conversación con el mismo móvil o con otro que tengamos alrededor.
   4. No facilitar nunca durante la llamada datos personales, familiares, de ubicación o contacto: Debemos controlar muy bien que decimos para no facilitar nosotros mismos datos que los estafadores utilicen a su favor y en nuestra contra. Especialmente prestaremos atención a no facilitar nuestro nombre o el de familiares, dirección del domicilio, del trabajo o donde nos encontramos en ese momento.
   5. Dejar siempre una línea de telefonía libre para intentar localizar al supuesto secuestrado: Intentaremos en lo posible alargar la conversación y con otro móvil que nos puedan prestar llamar al supuesto secuestrado y poder verificar si se encuentra bien.
   6. Intentar realizar alguna pregunta muy personal del supuesto secuestrado que nos permita conocer si es un falso secuestro virtual: Si no podemos llamar al supuesto secuestrado para ver si se encuentra bien, comunica su teléfono, no contesta u ocurra cualquier otra circunstancia que no nos permita verificarlo, siempre podemos pedir al secuestrador una prueba preguntándole algo personal del supuesto secuestrado que solamente sepa él.
   7. No dudar en cortar la comunicación. Desistirán y buscarán otra posible víctima: Si logramos verificar por algún medio que el supuesto secuestro es una estafa, o lo sospechamos por alguna otra causa, cortar la comunicación.
   8. No efectuar nunca por nuestra cuenta pagos monetarios o entregas de efectos de valor: En cualquier caso: NO PAGAR en dinero ni en otros enseres o efectos de valor para intentar solucionar el secuestro de forma rápida. Eso es precisamente lo que quieren los estafadores. Hay que intentar lograr obtener tiempo y avisar lo antes posible a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad para que un especialista nos ayude a solucionar el problema de forma efectiva.
   9. Denunciar siempre los hechos: Denunciar los hechos a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, ya sea Policía Nacional, Guardia Civil o alguna de las diversas policías autonómicas, es fundamental. Dar con este tipo de estafadores es muy complejo pues la mayoría están operando fuera de España, pero analizando los datos del caso en concreto y cruzando datos de diversos casos se puede llegar a identificarlos y pedir ayuda internacional, y sobre todo a establecer medidas que eviten futuras víctimas.
   10. Escribir inmediatamente todo lo que se recuerde: En cuanto se disponga de tiempo y si no se ha podido grabar la conversación, apuntar todo lo que se recuerde con el mayor numero de detalles para proporcionar la máxima información a los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.

Las estas proliferan en estos tiempos, como hemos comentado al principio, y su colaboración es fundamental para darles difusión e intentar erradicarlas. Además, contar con ayuda profesional es fundamental para aminorar los efectos que puedan generar estas terribles situaciones en nosotros, si nos toca vivir una de ellas. Así que ya sabe, ante cualquier duda contáctanos.

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