La eutanasia fue regulada legalmente en Bélgica en 2002, lo que garantiza que esta práctica, por otra parte con importantes dificultades éticas, se lleva a cabo siguiendo normas fijas.
Pero no ocurre lo mismo con la sedación terminal y los cuidados paliativos. Por ello, en un reciente trabajo (J Med Ethics 40;505-507, 2014) se proponen normas para regular estas prácticas, pues a juicio del autor la legislación un tanto obsoleta dificulta su adecuada aplicación.