Por la desaceleración en la suba de los precios de los alimentos, en mayo la inflación perjudicó menos a los sectores de menores recursos. Así, la indigencia prácticamente se habría extinguido en la Argentina . Esas conclusiones surgen del informe sobre precios que el INDEC difundió ayer.De esta forma, en mayo pasado la canasta básica alimenticia para una familia tipo (matrimonio y dos hijos) se encareció apenas $ 3,16 en un mes . Subió de $ 590,36 a $ 593,52 . En consecuencia, quienes ganan más de esa cifra no serían considerados indigentes.Según la medición oficial, en los primeros 5 meses de 2011, la canasta básica de alimentos se incrementó 2,6%, menos que la inflación promedio que sumó el 3,9%. De este modo, la inflación casi no habría afectado a los sectores de menores recursos .
En tanto la canasta de pobreza, que además de los alimentos incluye otros bienes y servicios, subió $ 11,55 en un mes. Ahora una familia de 4 integrantes dejaría de ser pobre si gana más de $ 1.307,19 mensuales.
Con estos valores, casi no habría indigentes. La anterior medición oficial, de la segunda mitad de 2010 arrojó un 2,5%, con lo que ahora se ubicaría en torno del 1% . En tanto la pobreza – que estaba en el 9,9%- se situaría por debajo del 8% . Sin embargo, para las mediciones alternativas, inclusive de consultoras oficialistas, los valores de las canastas son más altos y en consecuencia tanto la indigencia como la pobreza más que triplicarían las cifras oficiales.
Fuente: clarin.com.ar