Revista Internet

Según nuevo hallazgo sobre los mosquitos: pican por el color de la piel

Publicado el 07 febrero 2022 por Joseantortega

La habilidad de los mosquitos para detectar nuestra presencia y, en concreto, encontrar una zona libre de nuestra piel para clavar su probóscide (aguijón) sigue sorprendiéndonos. 

Según nuevo hallazgo sobre los mosquitos: pican por el color de la piel
Lea también:
Familiar del bebé asesinado por la Guardia Costera de Trinidad y Tobago: “No sabemos dónde está el cuerpo del niño”Trinidad y Tobago lamenta muerte del niño venezolano

Aunque parezca mentira, todavía no se conocen todos de los detalles del complejo proceso que facilita la orientación de las hembras de algunas especies de estos insectos en busca de sangre (humana y de diversos animales).

Algunas hipótesis planteadas en estudios científicos son realmente sorprendentes, como la expuesta en 2003 (y cuestionada posteriormente) en que se  indicaba que especies como los mosquitos tigre (Aedes albopictus) prefieren a las personas del grupo sanguíneo O sobre los grupos A, B o AB.

Existe mayor consenso y evidencias científicas sobre otros factores que facilitan las picaduras de los mosquitos hembra. El más importante es la capacidad de estos insectos de detectar el dióxido de carbono que los humanos y otros animales exhalamos al respirar. También  influye la temperatura corporal y algunos de los compuestos volátiles (olores) que exudamos. 

Estudio en un túnel de viento

Una nueva investigación dirigida por científicos de la Universidad de Washington (Estados Unidos) indica que, además de captar el dióxido de carbono de la nuestra respiración, las hembras de mosquitos que buscan sangre vuela hacia colores específicos, incluidos el rojo, el naranja, el negro y el cian. 

“Las hembras deseosas de picar ignoran otros colores, como el verde, el morado, el azul y el blanco”, indican los autores de esta investigación, cuyos resultados se publican en la revista Nature Communications (versión on line 4 de febrero 2022).

El equipo autor de este trabajo, cuyo primer firmante es el español afincado en Estados Unidos Diego Alonso San Alberto, considera que sus resultados ayudan a explicar cómo los mosquitos encuentran huéspedes, ya que la piel humana, independientemente de la pigmentación general, emite una fuerte “señal” de color rojo anaranjado a los ojos de estos insectos. 

Diego Alonso San Alberto es un ingeniero de software español que trabaja en el departamento de Biología de la Universidad de Washington (UW) en Seattle. Uno de los campos de investigación de este ingeniero son los túneles de viento de altas prestaciones, como los utilizados para llevar a cabo las pruebas con los mosquitos en el estudio que ahora se publica.

“Saber qué colores atraen a los mosquitos hambrientos y cuáles no, puede ayudar a diseñar mejores repelentes, trampas y otros métodos para mantener a raya a los mosquitos”, indican los autores en un resumen difundido por la Universidad de Whashington.

“Los mosquitos parecen usar olores para ayudarlos a distinguir lo que está cerca, como un huésped para picar”, destaca el autor principal del estudio, Jeffrey Riffell, profesor de biología de la UW. “Cuando huelen compuestos específicos, como el CO2 de nuestro aliento, ese olor estimula los ojos para buscar colores específicos y otros patrones visuales, que están asociados con un huésped potencial, y se dirigen a ellos”.

“Una de las preguntas más comunes que me hacen es ‘¿Qué puedo hacer para evitar que los mosquitos me piquen?'”, dijo Riffell. “Se suele decir que hay tres señales principales que atraen a los mosquitos: tu aliento, tu sudor y la temperatura de tu piel. En este estudio, encontramos una cuarta señal: el color rojo, que no solo se puede encontrar en tu ropa, pero también se encuentra en la piel de todos. No importa el tono de tu piel, todos emitimos una fuerte firma roja. Filtrar esos colores atractivos en nuestra piel, o usar ropa que evite esos colores, podría ser otra forma de prevenir la picadura de un mosquito”.

Los autores del nuevo estudio sigu rastreó el comportamiento de los mosquitos hembra de la especie Aedes aegypti –conocido como mosquito del dengue, mosquito momia o mosquito de la fiebre amarilla-, cuando se les presentaban diferentes tipos de señales visuales y olfativas. Como todas las especies de mosquitos, solo las hembras beben sangre y las picaduras de A. aegypti pueden transmitir el dengue, la fiebre amarilla, el chikungunya y el zika. Los investigadores rastrearon mosquitos individuales en cámaras de prueba en miniatura, en las que rociaron olores específicos y presentaron diferentes tipos de patrones visuales, como un punto de color o una sabrosa mano humana.

Sin ningún estímulo de olor, los mosquitos ignoraron en gran medida un punto en el fondo de la cámara, independientemente del color. Después de una rociada de CO2 en la cámara, los mosquitos continuaron ignorando el punto si era de color verde, azul o morado. Pero si el punto era rojo, naranja, negro o cian, los mosquitos volarían hacia él.

Los humanos no pueden oler el CO2 , que es el gas que nosotros y otros animales exhalamos con cada respiración. Los mosquitos pueden. Investigaciones anteriores realizadas por el equipo de Riffell y otros grupos mostraron que oler el CO2 aumenta el nivel de actividad de los mosquitos hembra: buscan en el espacio a su alrededor, presumiblemente en busca de un huésped. Los experimentos con puntos de colores revelaron que después de oler el CO2 , los ojos de estos mosquitos prefieren ciertas longitudes de onda en el espectro visual.

Con información del Diario Vanguardia.


Volver a la Portada de Logo Paperblog