Con este post sigo describiendo mis vacaciones durante el mes pasado. Como os narraba aquí, la segunda semana la pasé en Copenhague. Como en Estocolmo, una semana entera da para mucho, para ver más que únicamente la ciudad y es bueno, muy bueno! Aunque si no disponéis de ese tiempo, podéis escaparos a descubrir la ciudad, en unos tres días, más que suficiente. La ciudad es grande, aunque los alrededores, quizá, bajo mi punto de vista, no dan tanto de sí como la ciudad sueca.
El casco antiguo y la zona del parque de Churchill y la obligada visita a La Sirenita, puede verse en un día (tranquila y relajadamente). La primera zona, además de albergar edificios importantes de la ciudad (el Castillo Rosenborg, los jardines del rey, la Universidad de Copenhague, el Palacio de Amalienborg, el museo de diseño de Dinamarca, etc, es una importante zona comercial (la mayoría de las tiendas de la zona son cadenas, habituales en la mayoría de las ciudades, aunque también se encuentran tiendas propias de los países nórdicos que por desgracia no tenemos en nuestros países. Allí podréis disfrutarlas de lo lindo...).
Parque Churchill
La zona norte, cuyo metro es Norreport, tiene para mi gusto, las mejores tiendas, cafés y restaurantes. Son espacios de diseñadores propios, tiendas más pequeñas, de diseño, así como lugares para tomar un café o comer, con el encanto característico de estos países, todo deliciosamente nórdico.
Por la zona, un restaurante, que sin ser demasiado nórdico, tiene buena comida, es el restaurante Dalle Valle . Se sirve comida tipo buffet y el precio es muy bueno (la ciudad es cara, hay que reconocerlo). Justo enfrente se encuentra la Universidad y la Biblioteca, edificios preciosos, y en la esquina contraria, un diminuto café en el que sirven chocolates, tés y cafés. Una delicia. No muy lejos, otra bonita tetería, Singtehus y en Ostergate (la calle comercial por excelencia), , una gran y acertada recomendación de Raquel, de GT Fashion Diary. Se trata de una preciosísima tienda de diseño, con muebles y objetos de decoración maravillosos. Los precios, obviamente, imposibles, pero es un lugar perfecto para tomar buenas e inspiradoras ideas.
Hay Copenhague
Si volvemos a tomar como referencia el metro de Norreport y partimos de una calle cercana, Gotthersgade, deberemos dirigirnos hacia el barrio del Norrebro para encontrarnos con la plaza que alberga el mercado de Toruehallerne. En él hay paradas donde comprar pescado, carne, dulces, y también lugares para detenerse a comer (¡incluso tapas al más puro estilo español! Estamos en todos sitios...). Entre los lugares recomendados, os dejo con dos:
- Café Rosa, con estupendos panes y bizcochos de canela. Una muy buena recomendación de mi amigo Adelfo.
- Y también recomendación suya, y no peor: Agnes, para deleitarse con cupcakes (como ellos mismos dicen: "cake it away").
El barrio de Norrebro es interesante verlo el sábado, ya que por la mañana, en una de sus calles principales, Norrebrogade, se prepara un mercado de antigüedades, ropa y productos de segunda mano. Se puede dedicar la mañana del sábado a perderse entre las paradas del mercadillo y terminar la mañana comiendo en la zona de Blagardsgede. En esta calle hay varios barecitos - restaurantes con mesas tipo picnic para poder disfrutar de la comida al aire libre (en días de sol, que son pocos, muy pocos incluso en agosto...). Me recomendaron Props Coffee Shop aunque no pude detenerme por la lluvia, pero su aspecto... era "apetecible"!
Ricos desayunos, en casa o en los cafés de la ciudad
¿Alrededores?La verdad es que así como en Estocolmo nos resultó difícil escoger a qué lugares ir de entre todas las posibilidades, en esta segunda etapa del viaje, terminamos por quedarnos más en la ciudad. Una de las opciones es hacer la ruta de los castillos (imagino que algo similar a los castillos de Francia). Se trata de una ruta por pequeños pueblos pesqueros (cercanos a Copenhague) que albergan castillos abiertos al público.
Otra opción es escaparse a Malmö. Aunque sueca, esta ciudad está tan sólo a 30 minutos en tren de Copenhague, desde que hace algunos años, crearon el tren de alta velocidad que une ambos países-ciudades. Optamos por esta segunda opción. Hay trenes con mucha frecuencia que salen de la estación central de Copenhague (por cierto, la estación es preciosa) y el precio, para la distancia que recorre, es relativamente barato (ida y vuelta para dos personas, unos 36€). Además, se puede aprovechar el trayecto para ver la ciudad de Lundt, a 10 minutos en tren de Malmö. Se trata de una pequeña población de estudiantes que todo y su pequeño tamaño, tiene encanto y callejuelas preciosas. La visitamos bajo la advertencia de ser muy similar a Brujas. No hay que ir con esa idea. Hace algo más de un año estuve en Brujas y ese lugar me tiene el corazón robado. Mires donde mires paseando por sus calles, no ves más que cosas bonitas. No es el caso de Lundt. Es un lugar bonito pero no hay que verlo bajo la referencia de Brujas. Si vais esperando lo mismo (fue mi caso), os decepcionará.
¿Respecto a Malmö qué os diría? Es bonita su parte antigua, como en la mayoría de las ciudades, así como el parque de Malmöhus. Las callejuelas que llegan al parque, desde la zona centro, son realmente idílicas y esas sí que me recordaron mucho a algunos trocitos de Brujas.
Restaurante Toldboden
AlojamientoLas zonas que os recomendaría son Norrebro, La City (aunque quizá demasiado bulliciosa por ser la zona más céntrica y albergar el casco antiguo) y Vesterbro.
Tuve la suerte de alojarme en un precioso apartamento en una de las nuevas zonas emergentes (de "moda") a dos paradas de la estación central, el barrio en cuestión es uno de los que os recomendaba, Vesterbro, una buena elección. Si está en vuestros planes este alojamiento, hacerlo. En airbnb hay maravillas y vivir durante vuestra estancia en un piso, permite empaparse mucho más de la cultura, de la forma de vida del lugar, además de quizá ahorrar costes (si la alternativa es un hotel) y tener comodidades extras como poder cocinar (y experimentar recetas del lugar) o desayunar relajadamente en pijama sin la presión de madrugar marcada por los horarios del hotel...
El piso en el que nos alojamos
Fotos: Anna Alfaro
TransporteComo en Suecia, Dinamarca tiene el mismo sistema de transportes, todo coordinado cosa que permite, con una única tarjeta, viajar en tren, metro o bus, incluso alejándose de la zona centro.
Después de todo esto... ¿Qué os parece? ¿Os animáis? ¡Espero haber despertado el gusanillo en algunos de vosotros!
Música de fondo "What we done?" de Austra, álbum Olympia