No sé por qué cuando oí esta canción por primera vez me imaginaba un vídeo así. Sin embargo el sentido va mucho más allá y ese extremo no lo pueden alcanzar ni las palabras ni las imágenes pues se trata de sentimientos.
La canción habla del daño que pueden hacer las palabras, los gestos y las actitudes("ganas tú segundo asalto y lo haces sin mover tus brazos"). Ése dolor del alma que duele infinitamente más que un puñetazo en la cara. El aguijón de la abeja Maya y no estamos en el País Multicolor.