Hoy no voy a escribir sobre mis hijos ni sobre libros. Casi se me acaba enero sin celebrar que mi blog ha cumplido seis meses y no quería dejarlo pasar. Había pensado en escribir un post con una selección de textos publicados en este medio año, pero al final he decidido hacer un post de agradecimiento dirigido a todas las mujeres de mi vida virtual, con las que he aprendido tanto en los últimos meses: las que me leéis y a las que leo (me sigan o no). Porque el blog me ha servido de mucho: de forma de expresión, de desahogo, para ponerme en orden la cabeza, para compartir mis cosas… Pero también me ha servido para introducirme en un mundo nuevo: la blogsfera de madres, donde he encontrado mujeres de todo tipo de las que aprendo un montón.
Compartir la experiencia de la maternidad en la red abre horizontes. Tengo pocas amigas con hijos, pero me encanta charlar con ellas, intercambiar anécdotas, dudas, consejos… La blogsfera maternal es, para mí, algo parecido pero a lo grande. Una cafetería virtual en la que muchas, muchísimas, madres, cada una con un estilo de crianza diferente y una experiencia maternal distinta, intercambiamos perspectivas, enriqueciéndonos unas a otras. Con ellas aprendo cosas nuevas cada día. Me muero de risa con Krika y Olga, aprendo mucho de los completos tutoriales y manualidades de Karina, de las recomendaciones de Regina, de los consejos de María Luisa, de los análisis de Verónica, de las reflexiones de Sonia, de las experiencias de Idoia, de las propuestas de Montse. Encuentro en Ana un gran apoyo para mejorar la relación con mis hijos (y para descubrir recetas fáciles y ricas con mucho chocolate). Por el camino he tropezado con mujeres que han vivido experiencias similares a las mías, como Yolanda, con la que comparto un parto diferente y un hijo prematuro. Conozco Londres de la mano de Pequeños Pinceles (lo siento, no conozco tu nombre) y aprendo de ciencia con Seoane, que lo explica bien facilito y con actividades para niños para que esté al alcance de cualquiera.
De todas ellas y muchas más (algunas aparecen en mi blogroll, otras no) aprendo algo cada día. A unas cuantas las leo en cuanto publican, a otras no las sigo habitualmente, pero de pronto un día me meto en su blog y me doy un “atracón” y de algunas sólo leo sus blogs de forma ocasional, pero con mucho interés. Cuestión de tiempo y disponibilidad.
A todas vosotras muchas gracias. Porque yo empecé con esto del blog como una andadura en solitario y de pronto me he encontrado muy acompañada. Y, por supuesto, también gracias a las que visitan mi blog (todavía no he sabido de ningún hombre, con excepción de mi marido, que pase por aquí, pero si lo hay, que disculpe el femenino. Es que somos abrumadora mayoría), las que leeis mis post, las que sois tan amables de dejar un comentario y a las que compartís en las redes cuando algo de lo que escribo os gusta.
Besos!!