Seis Sesiones de Sexo (The Sessions) - De Sexo y Amor
Hace algunos años, era impensable ver en pantalla, grande o chica, que una mujer se atreviese a mostrar algo más allá de un escote atrevido. Hoy en día, la publicidad en cualquier medio de comunicación, visual o impreso, está llena de sexo para vender: sexo fácil, sexo de aventura, y sexo que, muchas veces, utiliza el pretexto de "amor" fugaz sólo para presentar escenas que han perdido toda la esencia natural y romántica que debería tener.Si, soy un romántico. Y prefiero el amor que el sexo. Y es por eso que encontrar una película como The Sessions, resulta gratificante en medio de otros filmes que rayan no en lo erótico, sino en lo grotesco. Protagonizada por un maravilloso John Hawkes, y co-estelarizada por la magnífica Helen Hunt, The Sessions nos cuenta la historia de Mark, un hombre que de pequeño sufrió de Poliomielitis, y quedó compleatemnte inmovilizado en una cama, conectado a in respirador artificial. Curiosamente no perdió la sensibilidad y es por eso que contrata a una terapeuta de sexo, para ayudarlo a perder su virginidad.
Dirigida por Ben Lewin (Georgia) y basado en un artículo de Mark O´Brien (cuya historia nos cuenta la película) y nominada en varios festivales (entre ellos san Sebastián y Sundance), tanto como película como en categorías de actor y actriz, Las sesiones (como se tituló en España) es una película que nos muestra el punto de vista del sexo de alguien, no sólo que es vírgen, sino que lo anhela con ilusión y esperanza, que le da miedo y al mismo tiempo lo quiere, y que en el proceso, experimenta cambios que no creía que fueran posibles. Y aquí no importa si Helen Hunt, a sus casi 50 años se haya atrevido a hacer un desnudo, demostrando a muchas otras (que en verdad necesitarían clases) que mostrar el cuerpo no necesariamente tiene que ser morboso o pervertido, sino que aún se puede hacer con fines artísticos y que en una película, sea eso lo que menos importe, y que el mensaje que se quiso transmitir, sea el adecuado y se entienda.
Hermosa película, recomendada para ver en pareja, y si gustan del cine independiente, ese que no necesita efectos ni presupuestos, y que solo depende de un buen guión, un buen director y dos actores que, con mucho talento, enfrenten un reto.
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